De amor también se muere (1946)

Paul Boray proviene de una clase trabajadora. Ha estado interesado en el violín desde que era un niño, lo que a su padre no le gustó porque lo sentía una pérdida de dinero, pero que su madre apoyaba. En su vida adulta, Paul quiere convertirse en violinista de concierto, y aunque muestra talento, no tiene las conexiones correctas para llegar al mundo de la actuación de concierto, al igual que su viejo amigo, el virtuoso pianista Sid Jeffers y la violonchelista Gina, ambos que, como Paul, entrenan con la Orquesta del Instituto Nacional. Gina y Paul tienen una conexión entre ellos, Gina que confiesa su amor por él. Mientras se presenta en una fiesta con Sid, Paul conoce a Helen y Victor Wright, sus anfitriones. Víctor es un hombre perceptivo, pero admitidamente débil, mientras que su esposa Helen es fuerte de mente pero insegura, lo que se manifiesta como neurosis. Ella constantemente trata de olvidarse de su vida infeliz por el consumo excesivo de alcohol. Helen se convierte en la benefactora de Paul, lo que finalmente resulta en una exitosa carrera de concierto para Paul. Pero los dos también se enamoran, un amor destructivo contra los deseos de la madre de Paul y Gina. Ese amor puede no solo destruir la carrera de concierto de Paul, sino también sus vidas.