Mala hierba (1949)

En San Francisco, durante la década de 1940, los agentes del Tesoro de EE. UU. Interrumpen un intercambio ilícito entre un marinero y un traficante de drogas. Durante el tiroteo, el marinero es asesinado pero el traficante de drogas escapa. Más tarde, los agentes siguen el rastro del narcotraficante fugitivo pero llegan a su departamento demasiado tarde. El traficante yace muerto, permanentemente silenciado por un asesino a sueldo contratado. Lo único que tienen los agentes es una libreta de direcciones que se encuentra en el cuerpo del traficante de drogas muerto. Entre las pistas hay una que parece ser prometedora: la dirección de una sombría empresa comercial canadiense con sede en Vancouver. El agente del Tesoro, George Morton, decide visitar a un convicto en Alcatraz y solicitar su ayuda para infiltrarse en el inframundo. Morton sabe que convencer al criminal encarcelado Johnny Evans para que se convierta en una paloma fecal para los federales no será fácil. Pero Evans es la única esperanza de Morton para infiltrarse en el inframundo y resolver el caso.