Brindis al amor (1953)

Tony Hunter, un famoso cantante y bailarín estrella de cine, se siente acabado y anticuado (con sombrero de copa, corbata y frac, para ser exactos). Los periodistas están interesados ​​en Ava Gardner, no en él. Pero sus viejos amigos Lily y Les Marton tienen una idea para un pequeño y divertido espectáculo de Broadway y él acepta hacerlo. Pero las cosas empiezan a salirse de control cuando el importante director/productor/estrella "artístico" Jeffrey Cordova se une a la producción, proclama que es un Fausto modernista e insiste en contratar a una primera bailarina, Gabrielle Gerard, para protagonizar junto a Tony, y es odio a primera vista. Y su celoso coreógrafo no ayuda a aliviar la tensión. El espectáculo está condenado por la pretenciosidad. Pero el romance, una epifanía de "hagamos un espectáculo" y un estreno triunfal están esperando entre bastidores. Después de todo, esto es una comedia musical.