Lo más buscado
No se encontraron resultados
- Escribir un artículo
- Iniciar discusión
- Crear una lista
- Subir un video
El anciano Don Senén ha dilapidado en juergas la herencia de su sobrina Begoña antes que gestionarla. Todavía queda un millón de pesetas, que sólo se entregará tras la muerte de Don Senén. Para conseguirlo, el anciano, en complicidad con Begoña y otros dos sobrinos (Ramón y Marcos) fingirá su muerte. Pero Ramón y Marcos realmente planearon envenenar a su tío poniendo cianuro en su leche para mantenerlos con dinero - Cuando los pobres Quintín, Justo y Paloma (empleados de la funeraria) se presentan en la casa de Don Senén se encontrarán con un panorama lleno de malentendidos.