Un hombre saca un par de fotografías de un armario y las mira en una mesa. La cámara se acerca a las fotografías, las cuales contienen desnudos femeninos. Los senos son visibles durante unos segundos.
Un hombre mira de reojo a través de una ventana a una prostituta sentada en un bar. La cámara se acerca a sus muslos. Más tarde, el hombre entra al bar y mira de reojo los muslos de la mujer, seguido por la cámara. Sin desnudez.
Un hombre mira fijamente a través de la ventana de la casa de su vecina y la observa mientras se desviste. Ella se desnuda hasta quedar en ropa interior victoriana y sugerente (liga, bustier, medias, etc.) y se inclina hacia delante, dejando al descubierto su escote. Sin embargo, no hay desnudez.
Por la mañana se muestra a un hombre y una mujer en la cama, y la mujer vestida con una bata. Se da a entender que el sexo tuvo lugar la noche anterior.
En la primera parte de la película reina una atmósfera tensa de perversión voyeurista y anhelo de un encuentro sexual.
Un hombre en un pasillo abraza a la fuerza y comienza a besar a una mujer antes de ser rechazado.