Los aventureros (1967)

Dos aventureros y mejores amigos, Roland y Manu, son víctimas de una broma pesada que le cuesta a Manu su licencia de piloto. Con aparente arrepentimiento, los bromistas les cuentan a Roland y Manu sobre un avión estrellado que yace en el fondo del océano frente a la costa del Congo lleno de riquezas. Los aventureros partieron en busca del botín. Los acompaña Laetitia, una joven artista que los trata como hermanos, juega con sus planes, hace esculturas con objetos encontrados y sueña con comprar un antiguo fuerte en la desembocadura del Charente. La punta del Congo resulta ser una doble cruz, y los aventureros deben recoger los pedazos. Un viaje a Fort Boyard completa el círculo.