Aún matamos a la antigua (1967)

Sicilia, finales de los años 60. Dos hombres mueren durante una partida de caza. La apresurada investigación indica que se trató de un asesinato cometido por motivos de "honor". Paolo Laurana es un profesor de izquierda que no está convencido de la verdad oficial y empieza a investigar por su cuenta. Encuentra ayuda de un abogado, el Sr. Roselló. Mientras investiga, queda fascinado por Luisa, la viuda de una de las víctimas. Pero la realidad es demasiado distinta a lo que Laurana podía imaginar. La realidad incluye no sólo a la mafia y a los políticos corruptos, sino también a las conexiones con la Iglesia. La realidad es que para Laurana sólo podría haber un final. No pasará mucho tiempo.