Una tormenta de verano (2000)

El viejo dueño de una tienda judía, el Sr. Shaddick ('Peter Falk'), de repente se encuentra a sí mismo responsable de un niño negro llamado Herman Washington ('Aaron Meek') que intenta escapar del caos de Harlem como parte de un programa de patrocinio. Al principio, el Sr. Shaddick no quiere nada más que deshacerse del niño, pero para fastidiar a la señora adinerada que intenta llevarlo a su casa, decide llevarse a Herman. A medida que pasa el tiempo, el Sr. Shaddick se preocupa por Herman y tiene la desgracia de ser el portador de malas noticias, lo que le recuerda cuando él mismo recibió un telegrama.