Comme les oiseaux (1992)

grácil y ligero como un pájaro,una aparición,ataviada con diáfanos velos blancos,aparece en los tejados de la Ópera Garnier,con una paloma blanca como compañera.Una voz la llama al escenario.otra voz,la de Violette Verdy,un profesor de baile,se dirige a ella con la admiración de aquel cuyas expectativas han sido satisfechas.Así es como los espectadores nos enteramos de que la criatura flotante no es otra que Monique Loudières,uno de los bailarines Etoile de la Ópera de París,y antiguo alumno de Violette.El fantasma entonces toma carne,pero solo hasta cierto punto, así es como Monique Loudières desafía la gravedad.A partir de entonces se la verá ensayando grandes papeles en escenarios de famosos ballets con compañeros de la talla de Patrick Dupond y Manuel Legris,ya sea bajo la guía benévola de grandes ancianos que transmiten sus conocimientos (Yvette Chauviré,Violette Verdy) o de maestros internacionales de la coreografía contemporánea (Jerome Robbins,Está Kylian...) Atento,concentrado,enamorado de la perfección,la vemos integrar los gestos,posiciones y movimientos que indican sólo para replicarlos en el momento de la manera inspirada que la convierten en su intérprete ideal.Al final,la bailarina y la paloma vuelven a ser insustanciales y desaparecen en el reino de las estrellas al que pertenecen.