Quai du Point-du-Jour (1960)

Emile es un trabajador siderúrgico en una fábrica de automóviles, un soltero empedernido de cincuenta años que lleva una vida tranquila. Una noche lo despierta una ráfaga de ametralladora. El café de la esquina de la calle ha sido asaltado. Una joven angustiada entra corriendo a su edificio de apartamentos y se esconde en su habitación. Cuando la policía hace una búsqueda, él la identifica como su amante de la noche. Madeleine le cuenta su triste pasado: ha roto todos los vínculos con sus padres, es madre soltera y está en las garras del inframundo. Emile envía a su protegida a la casa de la vieja mamá Dupont en los suburbios de París.