Mis siete chicas (1999)

Jesse es encantador, romántico y sabe cómo hacer la pregunta; él simplemente no puede enfrentar el matrimonio. Entonces, cuando él y Hannah se separaron durante la misma semana en que muere una ex prometida, decide resolver las cosas. Visita a cada mujer con la que ha hablado en serio para preguntar qué salió mal. Su amor adolescente, una mujer independiente que a veces se acuesta con él, y un grupo de lesbianas le dan consejos, al igual que Anabeth, muerta pero viva en sus sueños. Una ex sigue furiosa, pero con la ayuda de su ingeniosa colega, la sensata e insomne ​​Laura, Jesse incluso llega a hablar con ella. Está en el funeral de Anabeth, donde verá a Hannah y tal vez comprenda lo que lo ha estado eludiendo.