Mujer sin rumbo (1940)

Una mujer que ama las joyas es la amante de un gángster. Cuando él le quita su precioso collar, ella se lo entrega a la policía. Temiendo su venganza, navega hacia Sudáfrica, donde muchos emigrantes tienen la intención de trabajar en las minas. Durante el viaje, la heroína seduce a los hombres, primero a un pobre humano desafortunado, luego a un apuesto teniente que es degradado cuando el capitán descubre que ella comparte su camarote. Los emigrantes se dan cuenta de que no son bienvenidos en su nuevo país pero se rebelan.