Un Hombre que Duerme (1974)

Un joven estudiante parisino cae en un estado de profunda apatía, alejándose de todos los vínculos sociales y de las responsabilidades cotidianas. Deambula por la ciudad en un estado de trance, vagando por calles vacías y habitaciones abandonadas, sus pensamientos narrados por una voz invisible que detalla cada uno de sus movimientos y luchas internas. A medida que desciende más hacia su autoimpuesto desapego, se enfrenta a una claridad inquietante sobre su existencia y el mundo que lo rodea.