Dario M. (2003)

Darío acaba de pasar seis años en prisión por un delito sexual. El día de su liberación, jura que nunca volverá. El único problema es que Dario no tiene trabajo ni piso, y no puede quedarse con su madre Susann. No tiene más remedio que mudarse con su padrino Roger, que vive con su compañera Borka y su hija. Debido a que la hija de Borka, Tanja, tiene la misma edad que la víctima del crimen de Dario, Roger intenta mantener en secreto el pasado de su ahijado. Sin embargo, un hambriento periodista de la estación de televisión local descubre el pasado de Dario y advierte al público de una segunda ofensa. Cuando Dario va al "Street Parade" anual en Zurich junto con Tanja, ya está siendo perseguido por la prensa y la familia de su víctima que buscan venganza.