Super Bowl XXXVII (2003)

La 37ª edición del Juego de Campeonato Mundial AFC-NFC contó con los Oakland Raiders, con una larga historia de triunfos en el Super Bowl, y los advenedizos Tampa Bay Buccaneers, un equipo con una larga historia de inutilidad que hizo su primera aparición en la Superbowl. Los Raiders estaban sumamente confiados en la victoria, sintiendo que se les debía un Super Bowl después del controvertido partido de playoffs divisional de la AFC contra los Patriots la temporada anterior; Irónicamente, el entrenador de los Raiders en ese juego fue Jon Gruden, quien ahora era entrenador de los Bucs después de una costosa rescisión de su contrato por parte de Tampa a Oakland después de la temporada de 2001. Apodado "Chuckie" en honor al muñeco de terror pelirrojo y pecoso famoso en las películas de terror, Gruden lideró a los Bucs con una defensa asfixiante, mientras que el nuevo entrenador de los Raiders, Bill Callahan, también tenía una defensa potente y también tenía la historia de los Raiders de su lado.