Le fil cassé (2002)

En esta poética meditación sobre el paso del tiempo, un hombre explora su historia familiar como una declaración de amor a su madre. Michel Langlois no tiene hijos. Él es el final de la línea, el último eslabón de la cadena familiar. Viajando entre Quebec y Francia, pasado y presente, sueño y realidad, Langlois sube al árbol genealógico y da vida a parientes muertos hace mucho tiempo. Utilizando fotografías de archivo, recreaciones y secuencias documentales, Langlois de alguna manera engendra a su propio hijo, una película poderosa y madura que conmemora vidas vividas y fortalece su vínculo tanto con su propia familia como con la familia del hombre.