La habitación (2000)

Sophie, una estudiante de egiptología, así como Christoph, un actor sin trabajo, solicitan trabajo en un anuncio clasificado en el periódico. "Alguien que cuide mi casa durante seis semanas, buena paga". Es un anuncio de número de casilla, y ambos obtienen el trabajo, uno sin saber sobre el otro. Entran en la casa y se encuentran. Sophie no quiere quedarse seis semanas en una casa con un hombre desconocido. Así piensa Christoph: a él tampoco le gusta la idea. Pero, después de que el cartero trajera dos cartas certificadas con pago por adelantado, deciden intentarlo. Las reglas dicen que ambos pueden hacer lo que quieran en esa casa excepto una cosa; hay una habitación a la que no se les permite entrar y debe permanecer cerrada. Apenas aceptan este arreglo cuando comienzan a ocurrir cosas extrañas. Sophie y Christoph cuidan una casa con una habitación cerrada, donde todo (... o nada) puede ocultarse a los demás. "Todas las casas tienen una habitación prohibida", dice Christoph, la respuesta de Sophie, "al igual que nuestra alma".