Romance de fieras (1954)

Una mañana, Javier Ponce (Joaquín Cordero), un joven abogado desempleado, está comprando el periódico cuando escucha un disparo en un café cercano.Entra y ve a un hombre de mediana edad con una pistola en la mano, que demanda los servicios de un abogado.Javier ofrece sus servicios al hombre, que resulta ser el rico empresario Don Carlos Narváez ('Carlos Orellana') y afirma haberle disparado a su mejor amigo, pero no explica sus motivos y quiere evitar más investigaciones.Pronto, el hijo de Don Carlos, Ricardo (Armando Calvo), interviene y se comporta de manera muy arrogante con Javier.El joven abogado logra que don Carlos sea absuelto y él, a su vez, convierte a Javier en su administrador, para disgusto de Ricardo.Tiempo después, Javier descubre una casa solitaria donde una extraña mujer toca el piano, y comienza a obsesionarse con ella.Cuando Don Carlos muere le deja una carta a Javier explicándole que se acusó a sí mismo del crimen para evitar un escándalo a Gabriela, la hija del difunto, con quien Ricardo había tenido relaciones sexuales y luego se fue sin casarse con ella (algo inaceptable para México en el 1950), por lo que Don Carlos deja toda su herencia a Gabriela.Ahora, Javier debe encontrar a Gabriela, cuya ubicación actual se desconoce, antes que Ricardo...