Libera me (2000)

Dos décadas antes de que comience la historia, una niña salva a su hermano menor de ahogarse a manos de su padre abusivo. El niño observa cómo su hermana y su padre son consumidos por las llamas, lo que desencadena en él una fascinación psicótica por el fuego. Saca a la luz su nuevo interés por las llamas al incendiar la sala de niños del hospital donde estaba alojado. Para cuando comienza la historia, el niño se ha convertido en un hombre y ha perfeccionado sus tendencias pirómanas. El departamento de bomberos se encuentra muy ocupado luchando, no solo contra los incendios (y los problemas de tráfico de Seúl), sino también contra un lunático empeñado en eliminar a aquellos que detendrían sus incendios.