Stimme des Blutes (1938)

Dos hermanos (Albert Matterstock y Attila Hoerbiger), que son trapecistas, se llevan bien hasta que Hoerbiger se escapa con la esposa de su hermano. Matterstock no está muy contento cuando matan a su esposa. Pero, el espectáculo debe continuar, y reanudan su acto de trapecio como socios. Anneliese Uhlig se une al circo y a un artista de acrobacias y Matterstock se enamora de ella. Otto Wernicke, el padre de la señorita Uhlig, (que la obligó a cometer su peligroso acto) es asesinado, y Herbiger confiesa, en un acto de expiación, que cree que su hermano o la señorita Uhlig lo hicieron.