Die Rothausgasse (1928)

Milada creció en un burdel en Rothausgasse, pero aún no se ha convertido en una prostituta. Resignada al destino, siempre ha seguido a su madre Katherina, una puta envejecida que no pudo escapar de este medio. Ahora esta madre se está muriendo y hace que su hija, que ahora tiene 17 años y trabaja como camarera en el nuevo "salón" de la Sra. Goldscheider, prometa hacer todo lo posible para escapar de este ambiente.