Para siempre (2006)

Père-Lachaise, uno de los cementerios más famosos y hermosos del mundo, es el lugar de descanso final de un talentoso grupo de artistas de todas las épocas y rincones del mundo. Algunos, como Piaf, Proust, Jim Morrison y Chopin, son adorados hasta el día de hoy. Otros han caído en el olvido, o son visitados ocasionalmente por un solo admirador. En Forever vemos la belleza misteriosa, calmante y consoladora de este cementerio único a través de los ojos de personas de carne y hueso. Muchos vienen por su "propia" amada: esposos, esposas, familiares y amigos. Otros honran a "su" artista dejando un mensaje personal o una flor. Mientras los admiradores comparten con nosotros la importancia del arte y la belleza en sus vidas, el cementerio se revela gradualmente como una fuente de inspiración para los vivos. La muerte ofrece poco consuelo, excepto por el paso del tiempo, la melancolía de una tumba cubierta de musgo y la belleza y el poder de una pieza musical, un poema o una pintura.