Für immer Venedig (2009)

El consultor de seguridad jubilado Robert Frank acompaña a su hija reportera Claudia a una prestigiosa exposición de vidrio veneciano organizada por su madre, su ex esposa Louise Berengo y su segundo esposo Antonio. En la gran inauguración, los ladrones sabotean la alarma y organizan un apagón para cambiar una copia en pasta por el vaso de precipitados de la obra maestra medieval. Claudia consigue que Robert utilice su experiencia e intente recuperarla antes de que un escándalo arruine la reputación de Louise, posponiendo informar al seguro y a las autoridades. Presente estaba el principal sospechoso: el archirrival de Louise, el comerciante de antigüedades y arte Boris Jetrowitsch, a quien escucha ofrecer una pieza rara a la destacada coleccionista veneciana Anna Cantonelli. Robert está enamorado de la dueña de un restaurante local, Mia, y Claudia está enamorada del hijo de Mia, Marco, quien atendió la inauguración y está dedicado a su angelical pero gravemente enfermo hijo Luca. Robert no logra entregar un rescate de 100.000 euros exigido de forma anónima, pero descubre la molesta verdad.