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El profesor Muhammad Yunus nunca quiso ser banquero y ciertamente nunca imaginó ganar el Premio Nobel de la Paz. Sin embargo, su búsqueda para ayudar a los trabajadores pobres a invertir en sí mismos llevó a ambos. Conocido como el padre de los préstamos de microcrédito en Bangladesh, Yunus pasó años desarrollando el Grameen Bank, y en 1983 se convirtió en un banco con licencia con un giro: era propiedad de sus prestatarios, principalmente mujeres pobres. Yunus es famoso por decir que al desarrollar Grameen, deliberadamente hizo lo contrario de lo que haría un banco convencional. Hoy, el éxito de Grameen Bank ha cambiado la vida de 7.5 millones de prestatarios de Bangladesh y sus familias (en 38 países de todo el mundo).- elimínelo. Las mujeres en Bangladesh agregaron otros países y ahora hay 100 millones de millones de préstamos en todo el mundo. Pero ¿por qué detenerse en Bangladesh y en las naciones pobres? Mientras la industria financiera global lucha contra la caída de los mercados y la pérdida de empleos, Yunus se mantiene firme con su última iniciativa bancaria en Nueva York. Bajo un intenso escrutinio de la prensa internacional y académicos, Grameen America abrió sus puertas en un edificio de oficinas anodino en Jackson Heights, Queens, a fines de 2007. Como la U.S. El mercado crediticio se derrumbó y los gigantescos bancos de Wall Street flaquearon uno por uno, Grameen puso a 500 prestatarias potenciales en grupos de cinco, con préstamos de hasta3.000 ideas dispersas para pequeñas empresas que cada uno de ellos (quería probar) había desarrollado. Siguiendo el modelo de Bangladesh, cada grupo de cinco se convirtió en su propio comité de préstamos, con las mujeres haciendo pagos semanales y contribuciones a una cuenta de ahorro obligatoria mientras construían su actividad generadora de ingresos. En un año, la sucursal de Jackson Heights en Grameen America creció para prestar más1.5 millones a 550 mujeres. Apenas doce meses después de la apertura, agregaron dos sucursales más en Brooklyn y Manhattan, con el plan de abrir tan pronto como sea posible (docenas de) otras ciudades de los EE. UU. PARA CAPTAR UN DÓLAR sigue el camino de dos de estas prestatarias y los cambios que sus vidas experimentan en el transcurso de un año. Al trabajar con dinero prestado por primera vez, comienzan a darse cuenta de su propio potencial y del poder que lo acompaña. Esta es la historia inspiradora, que desafía la lógica, pero verdadera, de la idea de un hombre, un nuevo y extraño tipo de banco y las millones de vidas que cambió.