Sons of Art (2008)

Hace cincuenta años, un trabajador social apasionado y amante de la música de Rotterdam fundó un coro de niños para mantener ocupados a los niños de la posguerra y mantenerlos alejados de las calles. Hoy en día, el Rotterdam Boychoir es un coro muy respetado que contribuye a importantes eventos culturales en los Países Bajos y realiza giras por toda Europa. La película Sons of Art muestra cómo es ser parte de un coro de niños, una sociedad de niños con sus ritos y formas particulares, y qué impacto tiene cantar en un coro de niños en la vida de los niños de hoy y del pasado. Muestra que a pesar de que estos muchachos a una edad muy temprana cantan las obras de Mozart y Bach y participan en conciertos complicados como la Pasión de Mattheus, todavía son niños y juegan al fútbol con tanta pasión como cantan Purcell.