The Trap Door (2011)

Todo comienza con un mensaje de texto. Un mensaje anónimo enviado a los teléfonos móviles de una decena de jóvenes, hombres y mujeres. El mensaje es una invitación para asistir a un asesino de una fiesta. Nadie sabe quién envió el mensaje, pero resulta ser una invitación que nadie puede rechazar, pero de la que todos se arrepentirán. Dentro de las puertas de una mansión en ruinas, se reúnen, comen, beben, festejan y pasan el mejor momento de sus vidas, es decir, hasta que es hora de irse. La puerta principal no se abre; la puerta trasera no abre. Las puertas que alguna vez conducían a habitaciones familiares ahora conducen a otras nuevas; algunas puertas se abren a otras puertas, y algunas van directamente a callejones sin salida. Solo una cosa permanece constante: cada puerta es una trampa, dejando solo una salida.