Caballos (2010)

La cultura de las carreras de caballos de Irlanda ha producido algunos de los mejores atletas del mundo, y esta película nos introduce en las vidas de tres de ellos en el transcurso de un año de carreras difícil, centrándose no en los jinetes o entrenadores, sino en los propios caballos. . Los protagonistas demuestran ser menos reticentes de lo que uno podría imaginar, y mientras los vemos entrenar, descansar, jugar y correr, indudablemente emergen personajes distintos. Están enmarcados por una colección carismática de actores secundarios humanos, desde su apuesto entrenador malhablado hasta un mozo de cuadra anciano que obviamente prefiere los caballos a las personas, pero que en última instancia atraen nuestra atención por sí mismos. Sin adentrarse nunca en el territorio de Disney y evitando el sentimentalismo, Horses plantea preguntas básicas sobre qué constituye el carácter y quién puede tenerlo.