Afternoon of a Faun: Tanaquil Le Clercq (2013)

De todas las grandes bailarinas, Tanaquil Le Clercq quizás haya sido la más trascendente. Con un cuerpo como ningún otro anterior, cautivó a espectadores y coreógrafos por igual: su físico alargado, de caballo de carreras, se convirtió en el nuevo prototipo del gran George Balanchine. Su estilo único, humor y autenticidad redefinieron el ballet para todos los bailarines que siguieron. Sorprendentemente, ella fue la musa no de un gran artista sino de dos; Tanto George Balanchine como Jerome Robbins la amaban como bailarina y como mujer. Balanchine se casó con ella y Robbins creó su famosa versión de Tarde de un fauno para Tanny. Tanaquil Le Clercq era la bailarina más destacada de su época hasta que de repente todo se detuvo. En una gira por Europa, sufrió polio y quedó paralizada. Ella nunca volvió a bailar.