Bajo un manto de estrellas (2014)

En el antiguo convento de Calatrava se instalaron en 1936 la casa de estudios superiores, el noviciado y el seminario de humanidades para niños que daban sus primeros pasos en la vocación dominicana. Un total de cien personas vivían en el lugar durante los meses del año escolar. Pero la circunstancia de las vacaciones de verano había reducido a la mitad a los habitantes de Calatrava a mediados de julio de 1936. Sólo los implicados en los hechos que resultaron dolorosos o trágicos comenzaron a seguir la sublevación. En el nerviosismo expectante del primer día, la cosa no fue de molestas visitas y consultas sospechosas. Pero cuando los religiosos presenciaron el incendio de la cercana parroquia de la Madre de Dios, y no la tormenta, seguro que se cernía sobre ellos.