Lo más buscado
No se encontraron resultados
- Escribir un artículo
- Publicar debate
- Crear una lista
- Subir un video
Miguel es el coyote perfecto: dedicado, resuelto, su historial intachable. Su hogar es el camino sinuoso del migrante: la grava del callejón trasero, el pavimento desmoronado y, por último, el río. A pesar de este registro perfecto, Miguel no es ajeno a la muerte. Su apodo, "El Maldito", insinúa lo que pronto veremos por nosotros mismos, ya que Miguel parece perseguido por los muertos y los moribundos. Los encuentra por los caminos del desierto; escucha sus confesiones y participa en sus últimos deseos. La casa de Miguel, al igual que el hombre mismo, está sola; fotografías amarillentas respiran el suspiro de una vida entregada a un propósito singular - cruzar a su pueblo a una nueva vida. Hay señales de que esta lucha silenciosa pronto se romperá. Cuando un terrible accidente lleva a Miguel al costado del camino, el orden de su vida se arruina, ya que Elena, la única sobreviviente del accidente, reconoce a Miguel.