Cooper Jack Rubin

Cooper siempre ha amado una entrada dramática, comenzando con su nacimiento prematuro tres meses antes de lo previsto. Aunque era del tamaño de una lata de refresco, los padres de Cooper sabían que su pequeño milagro de dos libras estaba destinado a algo grande. A la edad de tres años, cuando la mayoría de los niños estaban cautivados por Elmo, Cooper desarrolló una obsesión con "El Fantasma de la Ópera", seguido de una afinidad igualmente profunda por "El Mago de Oz" y los talentos de Judy Garland. Cooper comenzó a perfeccionar sus habilidades para escribir y aparecer en muchas películas caseras y "dirigir" a su hermana mayor Piper, a su perro Sawyer y al gato Andrew Lloyd Webber. De las películas caseras, Cooper cambió a escenarios y pantallas más grandes. Su pasión por la actuación se consolidó mientras trabajaba en los estudios locales de arte donde actuó en proyectos teatrales como The Lion King, Seussical The Musical y Alice in Wonderland. Después de un tiempo muy corto de trabajo y aprendizaje en el Screen Actors Studio de Debby Gaudet en Nueva Orleans, Cooper fue firmado por una agencia. Su motivación y su arduo trabajo se han visto recompensados ​​con una serie de producciones que se estrenarán en 2019, y ama cada minuto de su carrera emergente en la pantalla grande y pequeña. Cuando no ensaya escenas, a Cooper le gusta cantar con el coro de la escuela (y en casa, constantemente, y para quien lo escuche), realizar experimentos culinarios y pasar tiempo con amigos y familiares.