Zoraida Marrero

Célebre mezzo soprano cubana que se hizo conocida como "La alondra de Cuba" (La alondra de Cuba) por su magnífica voz y estilo elegante. Nacida en el pueblo de Bejucal, de adolescente en La Habana tomó lecciones de música y canto del prestigioso tenor convertido en pedagogo Francisco Fernández Dominicis, quien dirigió una academia para desarrollar nuevos talentos. A fines de la década de 1920, la señorita Marrero comenzó su carrera en serio al ganar varios concursos de talentos en la radio. Pronto fue elegida por el compositor más influyente de Cuba, Ernesto Lecuona, para cantar sus canciones en recitales tanto en el escenario como en transmisiones de radio. Uno de los primeros triunfos de Miss Marrero tuvo lugar en 1933 cuando cantó ante el presidente Franklin Delano Roosevelt y el Congreso de los Estados Unidos como parte de una delegación oficial cubana enviada a Washington D.C. para celebrar la elección presidencial de FDR. Se informó que el Presidente se mostró bastante conmovido por la interpretación de Zoraida de "Quiero tus besos" escrita por el señor Lecuona, y felicitó a la joven cantante besando respetuosamente su mano. Los críticos musicales estadounidenses también quedaron impresionados por la actuación que elogiaba a Zoraida en artículos impresos. Una vez de vuelta en La Habana,Miss Marrero se convirtió en la favorita del público como la máxima intérprete del repertorio de Lecuona que incluía zarzuelas,operetas e innumerables canciones románticas que se convirtieron en estandartes imperecederos en su voz.En 1939 el Maestro Lecuona la presentó en el Teatro Nacional integrando conciertos conocidos como "Los Tríos Lecuona" en los que compartió escenario con las sopranos Georgina Du Bouchet y María Ciérvide.Poco tiempo después, Zoraida pasó un mes actuando en San Juan,Puerto Rico con Lecuona y a su regreso a La Habana protagonizó la película "Cancionero Cubano",su única incursión conocida en el cine.Al año siguiente llegó otro hito en la carrera de Zoraida.Her SRO concerts with Lecuosa in Buenos Aires,Argentina en la que cantó arias de zarzuela y sus canciones de amor más populares.También se le pidió que cantara en la influyente Radio Belgrano, que llevó su voz única por toda Argentina.Fue entonces cuando los críticos musicales comenzaron a llamarla "la alondra de Cuba",un cariño que prendió en los medios y el público de todo el continente americano. Su éxito en el género de la zarzuela fue tal que durante el período 1941-1942 su obra consistió principalmente en zarzuelas bajo la dirección de Miguel de Grandy. En ese momento, Zoraida volvió a hacer historia cantando en los estrenos cubanos de dos icónicas zarzuelas de España, "Luisa Fernanda" (música de Federico Moreno Torroba) y "Doña Francisquita" (música de Amadeo Vives). En 1946 cantó en Nueva York en el musical del off-Broadway "Havana-Madrid", un éxito de taquilla que fue elogiado por la crítica. Luego de estos triunfos volvió a salir de gira, presentándose como siempre en radios y escenarios de México, Panamá, Colombia, Venezuela, Chile, Perú y de regreso a Argentina para una larga residencia de dos años en ese país. Para la década de 1950, Zoraida Marrero había alcanzado un estatus de leyenda en su país y en el extranjero. Con el advenimiento de la televisión en Cuba, los productores siempre pudieron contar con ella para actuar en los muchos programas de variedades de esa época y obtener los más altos índices de audiencia. La gente simplemente la idolatraba sintonizando cada vez que cantaba en la radio o la televisión, asistiendo a sus representaciones teatrales y comprando sus grabaciones. La gente todavía recuerda aquellas noches mágicas cuando Zoraida cantaba con Nat King Cole en el famoso club nocturno y casino Tropicana de La Habana. En 1959, la vida en Cuba cambió drásticamente debido a la Revolución Cubana. Se instituyó una dictadura comunista y Zoraida y su familia fueron de los primeros en huir de la desdichada isla en 1960. Se instalaron en Nueva Jersey y la legendaria intérprete intentó relanzar su carrera en Estados Unidos. Sabía que no sería fácil y dijo que "preferiría luchar en libertad que cantar en la esclavitud", según informaron en su momento los medios. Zoraida pronto regresó a los estudios de grabación y tuvo un éxito en el mercado español de Estados Unidos con la canción "Yo volveré" escrita por su compañero en el exilio Eduardo Davison. Siguieron más grabaciones, así como actuaciones de gran éxito en el Carnegie Hall en los espectáculos musicales "Cuban Nights". Zoraida también realizó varias giras por Puerto Rico, República Dominicana, Panamá y, por supuesto, Miami, donde ahora residían muchos de sus fanáticos cubanos. El tiempo pasó y Zoraida, llegando a la edad de la jubilación, aceptó un contrato a largo plazo cerca de su casa en el lujoso club nocturno Liborio de la ciudad de Nueva York, donde sus recitales siempre estaban llenos. Es difícil precisar la fecha exacta de su retiro ya que continuó actuando durante muchos años y también se la vio en ocasiones en la televisión española. Verdaderamente Zoraida Marrero ha quedado para siempre presente en la memoria de todos los que la vieron actuar. También es recordada gracias a sus grabaciones que conservaron su exquisita voz aún ahora que la "alondra cubana" ya no está entre nosotros.