Tiffany Underwood

Nacida y criada en Seattle Washington, Tiffany Underwood siempre estuvo muy cerca de su madre y su abuela. Su padre estaba entrando y saliendo de su vida cuando era niña y falleció de cáncer. Poco después de graduarse de la escuela secundaria, la madre de Tiffany desarrolló cáncer cerebral y se deterioró lentamente. A la edad de 22 años, Tiffany dio a luz a su hija, y ahora sigue los pasos de su madre como madre soltera de una niña de catorce años. Tiffany lleva el peso del mundo sobre sus hombros, tratando de mantener a su madre y abuela y mantener unida a la familia. Tiffany Underwood ha estado trabajando como operadora de autocares para Community Transit durante el último año y medio. Los deberes de Tiffany son muy rutinarios y sin estrés. Tiene un montón de pasajeros de autobuses regulares a los que saluda todos los días con una sonrisa. Pero desde que llegó la pandemia, cuando llega al trabajo todas las mañanas alrededor de las 4:00 a. M., Desinfecta mucho su autobús antes de comenzar el día. Dado que conduce por la ruta de cercanías, normalmente lleva a enfermeras, médicos y trabajadores de supermercados hacia y desde el trabajo. Incluso se detiene frente a un hospital y deja a los pacientes que necesitan ayuda. Ella se enorgullece de desempeñar un papel clave para llevar a los trabajadores esenciales a su lugar de trabajo de manera segura. Ella cree en su propia manera especial, ella también está ayudando a salvar vidas. Tiffany ha tenido que dedicar muchas horas extra. Algunos días, puede trabajar hasta catorce horas al día. Tiffany normalmente trabaja un turno de cuatro horas por la mañana, se reporta a casa durante unas horas a la mitad del día para ayudar a educar en casa a su hija y luego regresa al trabajo al final de la tarde para otro turno de cuatro horas. Después del trabajo, Tiffany a menudo le deja la compra a su abuela, quien recientemente se recuperó de una cirugía de vesícula biliar y no tiene mucha movilidad. Su abuela ha sido su apoyo en todo lo relacionado con su madre y teme que si pierde a su abuela, que tiene diabetes y presión arterial alta, perderá todo su sistema de apoyo.