Dora Pereli

Dora pasó sus tiernos años de niño, luchando con sus hermanos, peleando con un perro que la pesaba más y haciendo que las mamás del fútbol se volvieran locas mientras escalaba cosas en el patio de recreo (los niños mayores de 5 años tienen derecho a escalar).Comenzó su formación en conservatorio en voz y violonchelo a la edad de 6 años.Entre años de cantar en el coro en la iglesia hippie de sus padres, hasta actuar en orquestas de violonchelo y grupos de cámara, pasó una gran cantidad de tiempo en el escenario.Ese deseo de actuar se hizo más fuerte, llevándola a la escuela secundaria, donde invirtió su tiempo actuando en las obras de otoño y cantando y bailando en los musicales de primavera.Entre todo el canto, el violonchelo y la actuación, viajaba de mochilera durante los veranos, trabajaba en la pizzería local, compraba artículos de segunda mano en buena voluntad y bromeaba con sus hermanos en las cenas familiares nocturnas.Pasó dos años universitarios estudiando actuación en Baton Rouge (¡Geaux Tigers!) donde encontró su amor por actuar frente a la cámara.Ese amor y ese deseo de estar en el corazón del negocio, la empujaron a comprar un antiguo convertible y un viaje por carretera con su papá desde Boston a Los Ángeles.De arriba hacia abajo todo el camino, quemaduras de sol y todo.Le encanta Tinseltown y la gente hermosa y creativa que vive aquí.Le gusta caminar por las colinas, todavía canta y toca el violonchelo en una banda, actúa en todo tipo de cosas, elegantes y no tanto, y todavía discute con sus hermanos siempre que puede.Imaginar y crear cómo sería la vida como otro ser humano, y luego convertirse en ese humano por un período de tiempo, es un arte vulnerable y expresivo que Dora continúa aprendiendo, practicando y explorando.No puede imaginarse haciendo otra cosa con su vida, porque le da mucha alegría.