Dolores del Rio

Dolores del Río fue una de las primeras estrellas del cine mexicano con proyección internacional y que tuvo una carrera meteórica en el Hollywood de los años veinte y treinta.Del Río provenía de una familia aristocrática de Durango.En la revolución mexicana de 1916,sin embargo,la familia lo perdió todo y emigró a la Ciudad de México,donde Dolores se convirtió en socialité.En 1921 se casó con Jaime Del Río (también conocido como Jaime Martínez Del Río),un mexicano rico,y los dos se hicieron amigos del productor/director de Hollywood Edwin Carewe,quien "descubrió" a Del Rio e invitó a la pareja a mudarse a Hollywood donde iniciaron carreras en el negocio del cine (ella como actriz,Jaime como guionista).Finalmente se divorciaron después de que Carewe la eligiera para su primera película, Joanna (1925),seguido de High Steppers (1926),y Pals First (1926).Tuvo su primer papel protagónico en la versión muda de Carewe de Pals First (1926) y saltó al estrellato en 1928 con Carewe's Ramona (1928).La película fue un éxito y Del Rio fue aclamada como una mujer Rodolfo Valentino.Su carrera siguió ascendiendo con la llegada del sonido en el drama/romance Bird of Paradise (1932) y el exitoso musical Flying Down to Rio (1933).Más tarde se casó con Cedric Gibbons,el conocido director de arte y diseñador de producción de los estudios MGM. Dolores regresó a México en 1942. Su carrera en Hollywood había terminado y un romance con Orson Welles, quien más tarde la llamó "la mujer más emocionante que he conocido", provocó su segundo divorcio. El director mexicano Emilio Fernández le ofreció el papel principal en su película Flor salvaje (1943), con un resultado totalmente inesperado: a los 37 años, Dolores del Río se convirtió en la estrella de cine más famosa de su país, rodando por primera vez en español. Su asociación con el equipo de Fernández (el director de fotografía Gabriel Figueroa, el escritor Mauricio Magdaleno y el actor Pedro Armendáriz) fue la principal responsable de crear lo que se ha dado en llamar la Era Dorada del Cine Mexicano. Con cuadros como María Candelaria (1944), Los abandonados (1945) y Bugambilia (1945), del Río se convirtió en la belleza mexicana prototípica. Su carrera incluyó cine, teatro y televisión. En sus últimos años recibió elogios por su trabajo a favor de los niños huérfanos. Su última película fue Los hijos de Sánchez (1978).