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Cualesquiera que sean sus limitaciones como actriz, Charlott Daudert lo compensó con efervescencia con los ojos abiertos y una personalidad linda y luchadora. La rubia burbujeante comenzó a trabajar como editora de la sección infantil de un periódico (como "Aunty Charlotte") en su ciudad natal de Königsberg, Prusia Oriental. Ella también incursionó en el diseño de diseños de vestuario. El abandono de su carrera periodística parece haber sido repentino y completamente accidental: acompañar a un amigo a una audición teatral como "apoyo moral" resultó en que Charlotte, no la amiga, se inscribiera en la escuela de arte dramático. Su "descubrimiento" se acredita generalmente al famoso actor Max Pallenberg, que asumió el papel de su mentor. Conocida por sus colegas como 'Charly', debutó en una parte minúscula en "Much Ado About Nothing" de Shakespeare y pasó los siguientes tres años en Stadttheater de Tilsit bajo la dirección de Pallenberg. Después de una breve temporada en la radio local, luego pasó a lienzos más amplios en Berlín, donde fue sometida a clases adicionales por Leopold Jessner. En 1933, Charly se había convertido en un consumado comediante y llamó la atención de Trude Hesterberg. Ella comenzó a realizar rutinas de comedia y cantando en varios cabarets populares, incluyendo "Musenschaukel" y "Die Katakombe". Al mismo tiempo, aderezó la pantalla como perpetuamente ingenua, sexy amiga de la heroína. Su producción fue bastante pesada hacia los entretenimientos escapistas, algunos de ellos no del todo mal: abril, abril! (1935), Der Etappenhase (1937), Kitty y la Conferencia Mundial (1939). Charlott gorjeó una exitosa canción popular ("Oh cariño, ya nadie tiene tiempo para el amor") en las ruinas de Berlín en Noche sin pecado (1950). Hubo otros papeles de apoyo en éxitos de taquilla, incluyendo las comedias Klettermaxe (1952) y Der blaue Stern des Südens (1951). Tristemente, a pesar de su perdurable popularidad como transportadora de felicidad sin complicaciones, el estrellato genuino nunca iba a estar en juego. El declive de la carrera de Charly iba a verse exacerbado por la depresión y el alcoholismo. En ocasiones, ella subía al escenario y olvidaba o confundía sus líneas. En el otoño de 1960, ella estaba haciendo planes para retirarse de la actuación y dirigir un B & B de artistas en Mónaco. Nunca sucedió. Solo cuatro meses después ella murió a causa de un trastorno sanguíneo a la edad de 47 años.