Rubye De Remer

Otra en el desfile de las glamorosas Ziegfeld Girls que brevemente reclamaron fama y fortuna en Hollywood, fue Rubye De Remer. El gran Flo la apodó "la rubia más hermosa desde Venus". Ravishing Rubye ganó un concurso de belleza de Nueva York en mayo de 1916 y luego modeló para el renombrado ilustrador Harrison Fisher. Cuenta la historia que un amigo la convenció de que probara suerte en el escenario. Después de un período con una compañía teatral en Dayton, Ohio, regresó a la Gran Manzana y audicionó con éxito para The Follies. Rubye apareció en "Midnight Frolic" en 1918, luego tuvo una temporada de baile y diálogos en la revista Weber and Fields "Back Again". Entre sus compromisos en el escenario, también se marchó de las películas y tenía la ambición de convertirse en "una actriz seria".Imágenes en huecograbado de ella en top U.S.las revistas de moda atraían a las mujeres a los productos de belleza.Entre 1917 y 1923, Rubye protagonizó veintidós películas para varios estudios, incluidos Fox, Goldwyn, World Film y J.Compañía independiente de Stuart Blackton.Uno de sus primeros largometrajes, el melodrama afrutado The Auction Block (1917), en el que interpretó a una chica de campo para ser 'subastada' por sus malvados padres, resultó ser un gran éxito de crítica y taquilla.Difícilmente podría decirse esto de muchas de sus salidas posteriores, en las que su presencia requirió cualidades decorativas y el modelado de vestidos extravagantes y joyas de valor incalculable, pero no capacidad de actuación.Rubye llegó a lamentar su situación en un artículo de 1919 en el Washington Post titulado "La belleza a menudo es una desventaja".Es discutible si pudo haberse convertido en una 'actriz seria' o no, pero ciertamente estaba destinada a no ser tomada en serio, al menos por los productores. La carrera de Rubye en la pantalla terminó así después de solo seis años. Desapareció en una relativa oscuridad durante trece años. Luego hizo un intento infructuoso de volver al cine. Se veía encantadora como siempre, pero su regreso en The Gorgeous Hussy (1936) fue en un papel demasiado pequeño para ser noticia. Con la muerte de su segundo marido, el magnate del carbón Benjamin Throop, Rubye se retiró a 'Sunkist', su mansión en el punto más alto de Hollywood Hills y silenciosamente desapareció de la conciencia pública.