Esther Estrella

La esbelta morena Esther Estrella merece una nota al pie de la historia de Hollywood solo por cómo se metió en las películas.La historia cuenta que ella frecuentaba las oficinas de casting, junto con muchos otros aspirantes que esperaban su gran oportunidad, cuando un director la llamó para que subiera a un autobús para el rodaje inmediato.La imagen era La luz de las estrellas occidentales (1940), una antigua ópera a caballo protagonizada por Victor Jory.Pasaron quince días después de que se terminó la película para que la directora Lesley Selander se diera cuenta de que había elegido a la actriz equivocada.En ese momento, el productor Harry Sherman había visto las carreras y estaba feliz con el resultado.Tan feliz, que eligió a Esther para interpretar el papel romántico en su próxima (y posiblemente la mejor) obra de Hopalong Cassidy, Three Men from Texas (1940).En verdad, la carrera de Esther solo duró un par de años y nunca llegó a ser más que señoritas decorativas del sur de la frontera en B-westerns o papeles sin acreditar en grandes producciones de estudio como Blood and Sand (1941) y Aloma of the South. Mares (1941).Terminó su breve aventura con las películas de la forma en que había comenzado: frente a William Boyd y dirigida por Selander (en una de las entradas menores de Hopalong, Undercover Man (1942)), y luego desapareció silenciosamente de la escena.