Jessie Ralph

Jessie Ralph era la hija de un marinero, que subió al escenario por primera vez a la edad de 16 años, actuando con una sociedad anónima en Boston, Massachusetts o Providence, Rhode Island (los relatos difieren). Era el año 1880, y Jessie tardó otros 26 años en hacer su debut en la Gran Vía Blanca en "The Kreutzer Sonata". Ya una actriz experimentada, disfruta de la tercera facturación. Su carrera en la pantalla comenzó con una y dos bobinas ya en 1915, pero su entrada adecuada en Hollywood no se produjo hasta 1933. Durante más de 20 años, la regordeta y con los pies en la tierra Jessie se ganó la reputación de actriz de personajes en Broadway interpretando a una variedad de enfermeras, mucamas y tías. Fue utilizada en musicales por George M. Cohan y actuó en papeles de Shakespeare, desde "Noche de Reyes" hasta "Romeo y Julieta". Fue enfermera de Juliet de Jane Cowl en la obra de 1923, que tuvo 174 actuaciones sin precedentes y fue coprotagonizada por Eva Le Gallienne y Katharine Cornell (¡increíble, teniendo en cuenta que la estrella ya tenía 39 años!). Como otras actrices exitosas de los escenarios, Jessie fue llevada a Hollywood para repetir un papel de éxito en Broadway, en este caso su tía Minnie en Child of Manhattan (1933). Después de media vida en el teatro, la estadía de Jessie en Hollywood fue relativamente breve, pero estuvo marcada por una serie de actuaciones memorables. Fue la encarnación definitiva de la entrañable enfermera Peggotty en David Copperfield (1935) e interpretó a la leal criada de Greta Garbo, Nanine en Camille (1936). Ella era la matriarca de Whiteoaks of Jalna (1935), una matrona de sociedad adaptable en San Francisco (1936) y la madre de una suegra de W.C. Campos, Hermisillo Brunch, en The Bank Dick (1940). Ya sea en comedia o drama, como una tía china en las versiones teatral y cinematográfica de La buena tierra (1937), o como una bondadosa hechicera en El pájaro azul (1940), Jessie siempre ofreció una buena relación calidad-precio. La reseña del New York Times del 12 de octubre de 1935 escribió sobre su actuación en I Live My Life (1935): "Jessie Ralph como la tiránica cabeza de familia, demuestra una vez más que es la mejor de las abuelas de la pantalla". Jessie se retiró de la actuación en 1941 después de que le amputaran una pierna y murió tres años después.