Dan Spector

Todo comenzó cuando Dan subió al escenario como abuelo en una producción escolar a los 9 años.Luego pasó a hacer imitaciones de Shelley Berman en su Bar Mitzvah.Ah, entonces no olvidemos una producción en el templo del Hombre de La Mancha, en la que retrató a Don Quijote (el Cervantes más bajito de la historia).Durante una actuación, uno de sus tacones de 2 pulgadas se cayó, junto con la mitad de su barba.Sin embargo, siguió cantando y cojeando, mientras se pasaba las manos por la cara en un intento de volver a adherir la maldita cosa.Eso es perseverancia, algo que aprendió de su papá.Así que, por supuesto, fue irónico que cuando finalmente se convirtió en profesional, después de todos esos años interpretando a un caballero maduro, terminaría interpretando a delincuentes juveniles adolescentes cuando ya tenía 20 años.Ahora que realmente ha madurado, físicamente y de otra manera, es mucho más feliz interpretando a villanos (Hacker) y dictadores desagradables (Napoleón en Le Jeu Des Soldats y Last Days of Toussaint L'Ouverture).Es genial poder levantarse por la mañana y no tener que ponerse blanco debajo de los ojos para lucir 17 en Happy Days.Dan cree que actuar es una profesión noble, especialmente en ese momento de conexión mágica entre el actor y el público.Y es por eso que le encanta hacerlo por sí mismo, por su propio valor intrínseco.Él también mantiene un fuerte compromiso con su familia, porque cuando las cosas van mal, ellos son en quienes realmente puede confiar.