Un completo desconocido: una crítica a las biopics de Hollywood

Un completo desconocido, la nueva biopic de Bob Dylan, está por estrenarse y no me genera ninguna expectativa.

Sé que muchas personas comparten mis reservas o prejuicios acerca de esta película. Su insatisfacción proviene de diversas razones: el respeto por Bob Dylan, una leyenda viviente, la molestia por el abuso de Timothée Chalamet en Hollywood y la impaciencia con el género desgastado de las biopics. Todas estas son quejas válidas que ya desarrollaré.

Sin embargo, el mayor problema que tengo con esta película es el siguiente: Timothée imitará la voz de Dylan. Para una película sobre un hombre como Dylan, el mejor cantante y compositor de la historia, ¿qué significa eso?

Tal vez la razón por la que Rami Malek no se atrevió a interpretar el canto de Freddie Mercury en Bohemian Rhapsody, mientras que Timothée está dispuesto a reemplazar la voz de Dylan en su biopic de rock, sea evidente: en la visión mainstream, que establece que Dylan no es un buen cantante. Las personas creen que el poder de sus canciones está más en las letras que le valieron el Premio Nobel. La suposición común es que, quienquiera que cante las palabras de Dylan, no hará mucha diferencia.

Existen pruebas de este punto de vista: la versión de "All Along the Watchtower" de Jimi Hendrix, la versión de "Knockin’ on Heaven’s Door" de Guns N' Roses y "Make You Feel My Love" de Adele son, probablemente, más famosas que las interpretaciones originales de Dylan. Ellos trajeron su personalidad al texto de Dylan. Entonces, ¿por qué Timothée no puede hacer lo mismo?

La respuesta a la pregunta anterior también es clara y sencilla: solo escucha las versiones de "Subterranean Homesick Blues" y "It's Alright Ma" de Timothée, y sabrás a qué me refiero. Él imita a Dylan de cerca, pero también con esfuerzo. Su voz carece por completo de la indiferencia de Dylan, su desafío casual y su humor oscuro, cualidades que forman el alma de Dylan.

Esto hace que el propósito de toda la película sea aún más desconcertante. ¿Por qué ver una película sobre Dylan sin la voz o el espíritu de Dylan?

Incluso si no fuera Timothée quien interpretara a Dylan, seguiríamos cuestionando si James Mangold es la mejor opción para dirigir una biopic sobre él. No estoy diciendo que Mangold no pueda hacer una buena biopic: Johnny & June: pasión y locura sobre Johnny Cash y Contra lo imposible sobre Ken Miles fueron ambas buenas películas.

Pero esas tuvieron éxito porque estaban ancladas en la vida cotidiana. Johnny & June: pasión y locura funcionó porque mostró a Johnny Cash como un hombre talentoso pero débil de voluntad, seducido por la tentación. Contra lo imposible tuvo éxito porque adoptó la perspectiva más racional de un ingeniero (Carroll Shelby) para observar la rareza y locura de Ken Miles. Ambas ilustran el enfoque de Mangold: es un hábil artesano, un buen narrador y un entretenimiento que sabe cómo conmover al público.

Pero no es un artista. Y solo un artista puede realmente entender a otro artista. Dylan no es alguien cuyo encanto reside en una narrativa conmovedora de ascensos y caídas. Él es un hombre definido por su constante reinvención artística, y no puedo imaginar que la fórmula de Hollywood de Mangold haga justicia a la naturaleza de Dylan como artista.

Incluso si dejamos eso de lado, no realmente necesitamos A Complete Unknown. Ya tenemos varias obras excelentes sobre Dylan. No Direction Home cubre el periodo que esta nueva película narra, y Martin Scorsese entiende claramente la necesidad interna de Dylan de una evolución perpetua—porque él también es un artista.

Si buscas una guía para principiantes sobre la influencia de Dylan en la moda, I’m Not There puede satisfacer esa necesidad: su retrato caleidoscópico de la cultura pop de los años 60 y 70 muestra la era en la que Dylan surfeó las olas culturales. Y su elenco es mucho más superior: Heath Ledger, Christian Bale, Julianne Moore, Ben Whishaw, Michelle Williams, Cate Blanchett.

Si quieres entender la mezcla de hecho y ficción en el proceso creativo de Dylan, Rolling Thunder Revue: A Bob Dylan Story by Martin Scorsese ofrece una experiencia perfecta. Dirigida una vez más por Scorsese, este "documental" parece serio pero dice tonterías. Sin embargo, el impacto musical siempre está presente. Estas contradicciones son la esencia de Dylan.

Después de todo esto, no puedo imaginar quién realmente necesita una biopic de Dylan como Un completo desconocido. Los fanáticos establecidos de Dylan no lo necesitan. Los posibles nuevos fanáticos curiosos sobre Dylan no ganarán mucho (¡sin la voz de Dylan!). Aquellos que conocen a Dylan pero no les importa realmente, ciertamente no lo necesitan, a menos que quieran ver un desastre de cuán lejos pueden ir los cineastas en su adaptación.

Eso deja solo dos grupos: los fanáticos de Timothée y Timothée mismo. Sus fanáticos verán cualquier cosa en la que esté, y tal vez descubran un mundo que no conocían. La película espera convertirlos, usando el poder de estrella de Timothée, en admiradores de Dylan.

En cuanto a Timothée, eso es fácil de explicar: las biopics de músicos tienen una alta probabilidad de ganar premios Óscar, o al menos ser nominados. El siglo XXI está lleno de ejemplos. Ningún actor puede resistirse a tal tentación. ¿Así que Timothée hizo haciendo una imitación de Dylan para conseguir premios? No hay nada de qué avergonzarse.

Pero ¿realmente Timothée posee esa energía imparable, esa búsqueda sobrenatural de la musa que Dylan tenía, sin que nada lo detuviera? ¿Puede transmitir el genio de Dylan? Lo dudo. Incluso dudo que pueda representar de manera convincente el egoísmo de Dylan (no solo fingirlo en la superficie).

Tal vez soy demasiado duro con una película que no he visto. Pero no me gustan las biopics de Hollywood y sus principios. Incluso sin ese prejuicio, creo que elegir a Mangold y Chalamet para una biopic de Dylan es problemático. Algunas películas nunca deberían existir. Sinceramente, espero que los actores y directores de Hollywood puedan controlar su vanidad y sus ambiciones y mantenerse alejados de este género agotado que debería haberse enterrado hace mucho.