¿Porqué parece ser tan DIFÍCIL hacer "comedias de horror"?

Dicen que dos de los objetivos más complicados de abordar cuando se trata de la construcción de un guion cinematográfico son el hecho de hacernos reír y asustarnos, las emociones más primitivas que tenemos como seres humanos. Es bastante contradictorio esta noción de la dificultad que supone crear emociones genuinas cuando estos dos géneros (el terror y la comedia) son tan ninguneados por la crítica y los festivales más “prestigiosos”. ¿Porqué lo hacen? Quiero creer que son intereses meramente políticos e ideológicos, no creo que un festival como el de Cannes tenga el apañamiento en no incluirlo solo porque “no es bueno” según sus estándares. Para eso existe, por ejemplo, el Festival de Sitges en cuanto a cine de terror y fantástico, pero en el caso de la comedia es bastante distinto: por lo general es relegada a algunas secciones no tan trascendentes o importantes de ciertos festivales.

¿Qué pasa cuando tenemos cineastas que se animan a dar el siguiente paso y mezclar ambos géneros en una misma obra? Cuando pienso en la serie que definió la mirada que tengo sobre este subgénero, siempre vuelvo a Twin Peaks. La serie cumbre de los 90s contiene muchos elementos aparte de la comedia y el terror como lo son ciertas características de los policiales, de la fantasía, de la ciencia ficción y también del drama familiar, pero la capacidad de David Lynch por sacarme una sonrisa e inmediatamente hacerme sentir escalofríos segundos después jamás lo había vivido de esa manera. En ese sentido, el talento de las mentes detrás de cámaras resultan ser, en mi opinión, la clave para el abordaje de una buena "horror comedy". El talento de alguien que nos pueda manipular y nos haga creer que todo está bien cuando en realidad todo está mal, y viceversa.

Todo esto comenzó en 1920, cuando el cine seguía siendo mudo y se experimentaba mucho al tratar de enganchar a la audiencia para brindarles nuevas experiencias que pudieran enriquecer el pacto que significaba ingresar a una sala. Hoy en día esa necesidad sigue ahí: nos hemos cansado tanto de los “contenidos genéricos” que ofrece el streaming y mucho del cine mainstream que cuando alguna propuesta algo radical sale a flote decidimos darle el visto bueno solo por ser…diferente. Me sucedió algo similar el año pasado, cuando el YouTuber y realizador Nicolás Amelio Ortiz anunciaba en la Comic Con el estreno de su serie ‘Hay Algo en el Bosque’, pero luego de verla creía que estaba ante una parodia. Como ejemplos de lo que yo considero les traigo tres títulos que a mi parecer mezclan sugestiva y sustanciosamente mejor los dos géneros:

1. THE LOST BOYS (Joel Schumacher, 1987)

Romance, comedia, terror y suspenso. ¿Que más podemos pedir? En mi opinión el director estadounidense es injustamente conocido por sus dos desastrosas películas de Batman que dan más vergüenza ajena que otra cosa, pero que gracias a títulos como este y otros como Un Día de Furia, Número 23 o Enlace mortal que lo puedo considerar un inentendido. La historia ronda alrededor de una familia que se muda a Santa Clarita, ciudad considerada como la Capital Mundial del Asesinato, y aunque ellos escépticos al respecto hacen oídos sordos, pronto descubren que hay una comunidad de jóvenes vampiros que merodean el lugar.

La película tiene muchos guiños a la cultura pop que la convierten en una de esas experiencias imperdibles para los más “geeks”: referencias de Superman y Batman, comics de vampiros y un pequeño homenaje a Thriller de Michael Jackson entre varios que pude distinguir. Pero también desplega recursos estéticos propios de las películas clase-B y bizarras que conectan a la perfección con la historia. En resumen, el director mezcla elementos de risa y terror en armonía para pasar de un estado al otro sin hacernos ruido como espectadores.

2. US (Jordan Peele, 2019)

Tarea más que difícil era superar lo logrado por el comediante transformado en director de cine en su ópera prima, Get Out, y si bien no lo logra, si se mantiene como uno de los mejores ejemplos modernos que combina la comedia con el terror. El título funciona como un simbolismo en si: puede ser considerado como una abreviación de U.S (United States=Estados Unidos) y a la vez criticar el deficiente sistema estadounidense en lo que respecta a seguridad y salud, y también puede funcionar de manera literal como el significado de la palabra (Us=Nosotros), haciendo alusión a la idea de que nadie nos puede reemplazar.

Pero, ¿que es exactamente lo que sucede en Us? La película nos remonta a los 80s, tiempos de cambio y prosperidad en el país, en donde en una noche que suponía estar repleta de diversión -en contraposición al espíritu americano idealista de Ronald Reagan- una niña llamada Adelaide se mete a una zona de juegos y es reemplazada por su "doppelgänger". El drama, agudizado por el extraño evento inicial, se tiñe hacia una home-invasion varias décadas después, con la familia de Adelaide siendo invadida en su hogar de vacaciones por una familia vestida con prendas rojas y tijeras en sus manos que…es identica a la suya. El costado humorístico es introducido con maestría gracias al extraño pero delirante sentido del humor de Peele, que conoce los códigos de ambos géneros a la perfección y transforma el terror absoluto en momentos ridículamente graciosos.

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3. RUBBER (Quentin Dupieux, 2010)

Por mucho tiempo me estuve preguntando cuáles eran aquellas películas que no supe comprender en su momento pero que luego con el tiempo el significado había cambiado. El inicio de mi relación con el cine de Quentin Dupieux fue inesperado ya que recuerdo haber visto esta película en el canal I.SAT hace muchos años, cuando era demasiado joven como para poder entenderla. Más de una década después, luego de ser testigo de ‘Yannick’ y ‘Daaaaaalí!’ en el Festival de Cine de Mar del Plata el año pasado, volví inmediatamente a esta locura para redescubrirla y así tratar de captarle algo de sentido a la historia. No solo pude entender las motivaciones del director que lo llevaron a encajar el terror con la comedia, sino que le dieron un nuevo significado a lo que yo creía que eran “comedias de horror”.

'Rubber' es parte del amplio abanico de críticas a la industria del cine y el espectador que tiene el realizador en su repertorio, por decirlo de una manera. Desde el inicio se nos hace parte de lo ridículo de su planteo mediante un diálogo introductorio de un policía que mira a la cámara, pero Dupieux, siendo uno de los más atrevidos e inteligentes que se pueda encontrar en el arte de disfrazarlo todo, nos engaña al hacernos creer que el policía nos habla a nosotros cuando en realidad le habla a una audiencia ficticia. Resulta difícil describir con palabras todo lo que pasa, pero en resumen y siendo algo vagos “es la historia de un neumático que cobra vida en el medio del desierto californiano, se obsesiona con una hermosa mujer y asesina a cualquiera que se ponga en su camino”.

POR JERÓNIMO CASCO

Publicado el 13 de AGOSTO del 2024, 19.03 PM | UTC-GMT -3

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