Maxxxine es la confirmación de Mia Goth como la nueva reina del terror

Cuando salió el tráiler de X (2022, dir. Ti West), nadie se imaginó que estábamos ante el inicio de una trilogía que, a lo tonto, acabaría revolucionando el género de terror, y que además coronaria a Mia Goth como reina del género. Dos años después, aquí estamos, listos para ver Maxxxine (2024, dir. Ti West) o, en otras palabras, para atestiguar la consolidación de Mia Goth como icono del terror.

Y es que el trabajo de la intérprete británica dentro de este escalofriante género no se limita a dar vida a típicas final girls o scream queens; la actriz se ha encargado de meterse en la piel de personajes que han reinventado dichos tropos, mismos que ya rayaban en lo cliché.

Mía Goth es una Final Girl, pero no es una Final Girl cualquiera

No es secreto que dentro del cine y la televisión abundan los personajes estereotipados. Y las características de dichos personajes son empleadas de acuerdo a las necesidades de cada género. Por eso es común que en películas de acción veamos heroínas o héroes que se autodenominan "desastre" pero al final del día todo les sale bien; que en los thrillers tengamos mujeres fatales; o que en las películas de terror existan las final girls.

Si hablamos concretamente de este tipo de personajes, las final girls son lo más cercano a una heroína que podemos encontrar dentro del cine de terror. Se les denomina así porque literalmente son los únicos personajes que llegan con vida al final de la película; algunas veces ellas mismas acaban con el villano, pero como un acto de defensa propia porque las final girls son incapaces de matar a una mosca.

Estos personajes normalmente están acompañados de otros (también estereotipados) como el chico atleta bocazas que es asesinado a mitad de la película, la chica tonta pero popular (casi siempre rubia) que muere probablemente por tratar de ser más lista que los demás, o el nerd que muere en el primer acto. La lista podría continuar. Pero si hay algo que destaca a la final girl del resto es que normalmente es la chica buena del grupo, la que no ha sido corrompida de ninguna forma. La chica final casi siempre acaba en aprietos por culpa de sus compañeros, nunca por ellas mismas. Y, cuando la vemos sana y salva antes de que los créditos finales empiecen a rodar, nos queda la sensación de que si sobrevivió es porque, entre todos, realmente era la única que lo merecía.

Por eso digo que Mia Goth no es una final girl del montón. Sus personajes, en especial los que interpreta dentro de la trilogía X, juegan con una dualidad que se agradece puesto que han renovado la percepción que se tiene de este tipo de roles.

Pearl y Maxine, dos personajes de armas tomar

En teoría, Maxine y Pearl son dos final girls en X y Pearl (2023, dir. Ti West), respectivamente. Pero en ninguno de los casos los personajes son victimizados.

En la primera película de esta trilogía, X, Mia interpreta a ambos personajes. Aquí Pearl es una anciana, de apariencia dócil (aunque bastante inquietante), pero de espíritu vengativo que se aprovecha de su imagen de manso cordero para atacar como un león a sus víctimas. En esta interpretación, el trabajo de Goth está acompañado de prótesis, un excelente trabajo de maquillaje, y su actuación también es bastante física ya que adopta la imagen de una octogenaria. Mientras que Maxine es una joven aspirante a actriz, liberal, sin escrúpulos, a quien vemos ser capaz de hacer lo que sea para cumplir sus sueños; y esa misma actitud caracteriza su espíritu de supervivencia a lo largo de la película.

En Pearl, precuela de X, vemos al personaje que le da título a la película en sus años de gloria, cuando ella al igual que Maxine soñaba con ser una estrella (perdón, ya lo era). Sin embargo, Pearl se veía así misma como una víctima de las consecuencias (atrapada en un pueblo en medio de la Primera Guerra Mundial, cuidando de su moribundo padre, esperando a su esposo que parece nunca llegar de la guerra), y por ende la vemos hacer lo que sea necesario para escapar al punto de que su personaje pasa de ser presa a cazadora.

Es curioso que Mia Goth intérprete también este tipo de personajes porque su apariencia se conjuga perfectamente con los patrones que han caracterizado a las final girls desde que se creó dicho concepto: tiene rasgos muy delicados, vulnerables, acompañados de una voz muy aguda, casi infantil. A simple vista es la típica chica indefensa, pero precisamente por eso sus interpretaciones son tan efectistas. Vemos como debajo de esa imagen impoluta de final girl, emerge una slasher queen, lo que resulta verdaderamente escalofriante.

Maxine viene a confirmar lo que atestiguamos en Pearl

Después de brillar con sus antecesoras, llegó el momento de hacer con Maxxxine (2024, dir. Ti West); esta película no solo concluye la trilogía sino que también servirá como una carta de amor al género slasher y la coronación de Goth como ícono del terror.

La película, ambientada en el vibrante mundo de Hollywood de los 80, sigue a Goth (una vez más en la piel de Maxine) mientras intenta navegar en el complicado mundo del entretenimiento; a la par, un asesino enmascarado acecha la ciudad.

Una vez más, su director, Ti West, ha elogiado la actuación de Mia, refiriéndose a ella como "la scream queen por excelencia". Por su parte, Goth ha sido más modesta acerca del título que le ha otorgado el director y el público; sin embargo, su innegable presencia en pantalla y su extraordinaria habilidad para interpretar personajes complejos, caracterizados por ser moralmente ambiguos, han cautivado a todos por igual.

Así que todo apunta a que Maxxxine es un testimonio de esa versatilidad como intérprete, mostrando sus dotes cómicos, dramáticos y su apabullante carisma. Con Maxxxine, Goth está afianzando su posición como la reina absoluta del terror, un género que en los últimos años ha acogido otras intérpretes como Samara Weaving, Jenna Ortega, Melissa Barrera y Anya Taylor-Joy.

Como diria Peal: Mia Goth is a staaaaaaaar

A pesar de ser el rostro de esta nueva era del terror, sería injusto reducir su carrera a este género cuando Goth ha brillado más allá. Aunque comenzó en el modelaje, pronto descubrió que su verdadera pasión era la actuación.

El rol que le abrió las puertas a Hollywood fue la controvertida película Nymphomaniac (2013, dir. Lars Von Trier), donde ofreció una interpretación audaz y muy valiente. Desde entonces, la hemos visto en cintas como High Life (2018, dir. Claire Denis), una historia de ciencia ficción; y Emma (2020, dir.Autumm de Wilde), una comedia romántica, adaptación del clásico de Jane Austen, de esta forma ha consolidado su reputación como una actriz versátil.

Aunque fue su colaboración con el director Ti West en la trilogía X la que ayudó a convertirse en ícono del terror, antes de interpretar a las ambiciosas Pearl y Maxime, ya la habíamos visto brillar en otras cintas del género como A Cure for Wellness (2016, dir. Gore Vervinky) y Suspiria (2018, dir. Luca Guadagnino).

Con su talento y dedicación, Mia Goth es una fuerza a tener en cuenta en la industria cinematográfica. Su ascenso (merecidamente) acelerado y su versatilidad la convierten en una de las actrices más prometedoras de su generación.