Jack Nichosol: El villano que encantó a tres brujas.

Cine: Terror y comedia en este imperdible filme.

Autora: María de los Ángeles Díaz.

Si de villano encantador debemos hablar, no podemos prescindir del fabuloso actor: Jack Nicholson. Al interpretar al misterioso y seductor Daryl en la película “Las brujas de Eastwick”.

Fue un filme americano en el ocaso de los 80' específicamente de 1987. Novela escrita por: John Updike y Michael Cristofer, el Director: George Miller la llevó a la pantalla grande, siendo un éxito de taquilla.

Tres mujeres ignoran que son brujas y accidentalmente atraen a un simpático sujeto.

La idealización del hombre perfecto, estimuladas por sus frustradas vidas amorosas, deciden crear un conjuro que termina resultando real, ignorando sus capacidades mágicas. Interpretadas por las actrices: Susan Sarandon, Michell Pfeiffer y Cher. Terminan por evocar a un hombre misterioso que llega a desatar a la ciudad moralista de Eastwick.

Con entradas bastante pronunciadas,

una sonrisa siniestra, mirada oscura y una contorneada manera de caminar, Este sujeto termina por seducir a un trio de sexy's mujeres; la rubia, la morena y la peli roja. Cumpliendo con los fetiches más recónditos de cualquier hombre en la faz de la tierra.

Daryl logra sucumbir a sus amantes haciéndolas huéspedes de su mansión, llevándolas a una ensoñación casi perfecta como cuál bebiera la poción de flor de loto. Encantador, seductor, holgazán, hedonista y despilfarrador de deseos excesivos y excéntricos, sólo placeres a sus amantes. Te hace creer en una vida de placeres inmediatos sin ningún tipo de esfuerzos.

En algún momento terminas por compadecer tal ensoñación parecen víctimas del síndrome de Estocolmo. Usadas por un malabarista de miedos ocultos con el objeto de manipularlas a su antojo. Llega un momento donde este personaje pervierte un poco a los lugareños de Eastwick.

La genialidad de esta obra maestra prioriza el poder y femineidad de la mujer provocando el despertar y la unión entre ellas. Siendo y reconociéndose ahora como las brujas de Eastwick sus rituales y conjuros se transforman en el arma para acabar con Daryl el demonio seductor e incluso es posible que el poder de la maternidad sea otro poder o razón de fortaleza.

Jack Nicholson en una de sus actuaciones más memorables.

Daryl contraataca. Un personaje minuciosamente bien construido y tridimensional. En el climax empezamos a sentir terror y suspenso. Al verlo degradado miras como el personaje se auto detesta: Desaliñado, violento y vengativo. Daryl molesto y avergonzado ante la comunidad Eastwick por una cantidad desencadenada de sucesos paranormales inexplicables en su contra, acomoda con su mano el cabello desordenado y va a la mansión a encarar a las brujas. El ritual embrujado que presenta a este personaje al inicio es el que termina por desterrarlo de la ciudad de Eastwick. Dejándolo muy lejos de estas tres mujeres. Aprenden que su valía no depende de una pareja sino de sus esencias, con un final abierto reaparece el villano encantador haciéndoles saber qué en algún lugar del universo él todavía existe.

Les recomiendo esta película si te gustan buenos clásicos ¡Gracias!