The Northman: el festín del cuervo.

Esta historia se sitúa en el año 895 D.C. en alguna parte de Islandia, allí se encuentra el reinado de Horvendill “El cuervo de guerra”. En esos tiempos, en las áridas tierras del norte, los habitantes se agrupaban alrededor de pequeños señoríos, como el que se nos presenta en esta película, para poder sobrevivir al frío y a las incontinencias propias del ártico. El príncipe Amleth, con apenas 13 años de edad, espera con ansias la llegada de su padre, quien se había ausentado por un tiempo para cumplir su deber en la guerra. Es aquí donde se desata la tragedia, el tío de Amleth, Fjölnir, traiciona al rey y se queda con su trono. Temiendo por su vida, el príncipe huye de la isla con la promesa de venganza.

Para empezar, hay que decir que Robert Eggers (director/guionista) realizó esta cinta junto al escritor Sjón (guionista), inspirado en un poema islandés. En él se cuenta la historia de Amleth, un príncipe desterrado en búsqueda de venganza. Este mismo poema sirvió de base para la ya conocida historia de Hamlet y, aunque comparten su origen, existen diversos detalles que separan “El hombre del Norte” con la famosa tragedia escrita por William Shakespeare. Trataremos aquí, de desplegar esta pequeña capa de análisis sobre algunos elementos importantes, con el fin de enriquecer el entendimiento de esta gran obra cinematográfica.

La importancia del cuervo en la mitología nórdica y en esta película.

Lo más interesante de la propuesta narrativa, a mi forma de ver, es la inclusion de la figura del cuervo. Animal que tiene un lugar relevante en la mitología nórdica, como también, en la historia de la propia película.

La secuencia inicial pone en cuadro al pajaro en cuestión. En ella, observamos a un par de cuervos que revolotean y toman vuelo en dirección al reino, guiando a la cámara hasta llegar al frente de Amleth, nuestro protagonista, quien está observando el retorno de su padre y sus tropas. Esto cobrará mayor sentido con lo que se explicará en los siguientes puntos, pero desde aqui vemos la intencion de ligar al animal con lo que acontece en esta historia.

La figura del cuervo, en la mitología nórdica es tal vez la más destacada; para empezar, está asociada a Odín, dios supremo de los nórdicos, el padre de todo. Según se dice, esto se debe a que el dios poseía dos cuervos llamados Hugin (pensamiento) y Munin (memoria), ambos eran enviados al alba para vigilar todo el mundo y regresar por la tarde. En ese momento del día, Odín se sentaba en su trono y los animales se posaban uno en cada hombro para susurrarle al oído, reportando aquello que vieron en su viaje.

La moral heroica en los pueblos nórdicos

Algo importante a destacar a la hora de entender lo que aquí se nos va a narrar, es la idea de los nórdicos sobre la muerte, la vida y la guerra. Morir en batalla era el anhelo máximo que podía tener un habitante de los pueblos del norte. Sus creencias dictaban que la guerra era la única forma de acceder a una muerte honorable y el único camino que les permitirá llegar al Valhalla (el paraíso para los vikingos). Según se relata en la mitología nórdica, las valquirias (vírgenes guerreras que montaba un caballo alado), serán las encargadas de retirar a la mitad de los caídos en la batalla y llevarlos a disfrutar de los placeres del paraíso.

"Árbol Yggdrasil: fresno del universo que une los distintos reinos de la mitología nórdica. De su raíz emana la fuente que llena el pozo del conocimiento, custodiado por Mímir."

Esta moral heroica, cuyo propósito de vida era combatir cada batalla con ánimos de morir, era necesaria para la supervivencia de este tipo de pueblo, esto se debía a que su base fundamental de vida era el conflicto y las frecuentes batallas con otros reinos; ya que, al encontrarse en tierras de tan pocos recursos, hacían del saqueo y la invasión, sus principales actividades para la obtención de recursos.

¡A partir de aquí puede haber spoilers!

El ritual: el bufón Heimir como Mímir, el pozo del conocimiento y la pérdida de la inocencia

El rey Horvendill, preocupado por haber notado la inocencia en los ojos de su hijo, decide llevar al príncipe a realizar un ritual secreto cuyo acceso solo está permitido a los de su linaje.

En esta ceremonia, se nos revela la verdadera intención del rey, quien al intuir la traición de Fjölnir, hace que Amleth, en el propio ritual, jure ante los dioses que lo vengaría y que cumplirá con esa promesa sagrada; de lo contrario, será maldito y jamás podrá ingresar al Valhalla.

El ritual es impartido por Heimir “El tonto”, quien hasta antes de esta escena, la pelicula nos lo había presentado como el bufón del rey; sin embargo, hora sabemos que también es una especie de chamán conocedor de los secretos de los reyes y el destino que los aguarda. Él es el encargado de iniciar al joven príncipe en el arduo camino que el destino le ha preparado y hacerlo comprender la importancia de su sangre. El apodo "El tonto" y labor de bufon, resultan una mascara perfeca para esconder tamaña astucia, como sucedía con los bufones en la antigüedad.

Podemos entender la figura de Heimir como la representación del gigante Mímir, personaje notable de la mitología nórdica. Según se cuenta, Mímir era el encargado de custodiar el agua de un pozo, cuya particularidad consistia en que aquel que bebiera de allí, se haría con el conocimiento absoluto. En un episodio, Mímir, le había negado a Odín beber de aquellas aguas sin antes hacerle una ofrenda; luego de negociar, el dios le ofreció a Mímir uno de sus propios ojos como sacrificio para poder acceder al manantial y hacerse con todo el saber del universo. Finalmente el gigante accedió.

El paralelismo entre Heimir y Mímir (además de la similitud entre ambos nombres), queda más claro en una escena posterior, en la cual aparece la cabeza cercenada de Heimir para revelarle la ubicación de un arma secreta que el protagonista de esta historia necesitará para llevar a cabo su venganza.

Heimir a Amleth en el ritual: “Vive sin miedo, porque tu destino está impuesto, y de él no hay escape.”

Luego de realizarse el ritual se consuma la traición de Fjölnir para con el rey, Amleth es testigo en primera persona de semejante acto, dejando atrás cualquier atisbo de inocencia que otrora había contenido su persona.

El lobo y El cuervo

Otro animal destacado en la mitología nórdica es el perro o su pariente más cercano, el lobo. Dentro de estos animales, los personajes más conocidos son: Fenrir, el lobo de Loki, quien será el encargado de darle muerte a Odín en el Ragnarok (el fin del mundo para los vikingos) y los lobos del dios Odín, llamados Geri y Freki.

En la película, Fjölnir, el hermanastro del rey, era conocido como “El perro negro”. Si nos centramos en esta cuestión antes dicha, la cual enfrenta a Fenrir (el lobo) con Odín (el cuervo), y la transpolamos a lo que acontece en la cinta, se nos clarifica el enfrentamiento del rey Horvendill “El cuervo de guerra” y Fjölnir “El perro negro”, siendo este último quien le terminará dando muerte al rey, cumpliendo con lo estipulado en el relato mitológico.

Fjölnir ingresando al salón del rey junto a su perro.

La aparición de Odín, las Valquirias y el Valhalla

En el momento que todo se trunca y el protagonista cae a merced de su tío, la divinidad se hace presente para que Amleth pueda salir de aquella situación y así cumplir con su destino. Esto no es caprichoso, ni siquiera un recurso sacado de la manga, pero eso lo desarrollaremos en el punto siguiente. Odín se presenta con su apariencia tradicional, un hombre mayor, con una barba larga, tuerto (el precio pagado por el conocimiento del universo) y cubierto con una parca negra; aquí tambien podemos notar que se encuntra rodeado de cuervos y empuñando su famosa lanza Gungnir.

El protagonista maltratado, herido e inconsciente se encuentra al borde de la muerte. Nuevamente se hace presente la figura del cuervo relacionada al Dios.

En este punto, la película nos amaga con la muerte de Amleth, y dispone para ellos la aparición de una valquiria que pareciera llevar al principe a la puerta de entrada del Valhalla, pero no, todavía no ha llegado el momento, todavía falta algo más.

El final está en el principio

“Óyeme, Odín, padre de todos los dioses. Convoca a las sombras de eras pasadas, de cuando las Nornas hilanderas regían el destino de los hombres. Oye de la venganza de un príncipe, sácialas en las puertas ardientes del Hel. Un príncipe destinado al Valholl. Óyeme.”

Con este rezo da inicio la película. Si prestamos atencion, en el primer acto, podemos notar que ya se nos ha contado todo lo que sucederá en la historia. Entendemos que el destino del príncipe es encomendado a Odín, y por eso, cada intervención divina está dispuesta para cumplir el propósito final, la venganza de Amleth. Brujas, magos y chamanes, son el conducto por el cual se expresa el devenir de la profecía, cada acto divino va encajando y guiando al protagonista a cumplir su designio. Todo nos dirige a la batalla en las puertas del infierno, donde sólo el Hel será testigo del combate final.

He escuchado muchas críticas a esta película, cuyo argumento principal es lo predecible de la trama ¡por supuesto que sí! A lo largo de todo este texto hemos visto que se trata de una historia clásica, muy repetida en distintas épocas y por distintos personajes, pero también, hemos visto que Eggers en ningún momento intenta ocultarnos esto. Con solo haber visto El rey leon ya se puede deducir por donde irá el asunto.Toda la narrativa está explícita en los primeros minutos de la película, todo lo que tenemos que hacer es acompañar el desarrollo de los acontecimientos que se nos muestra y no jugar al detective de argumentos, en un caso donde ya sabemos el final y se nos lo ha contado al inicio.

Explorar estas cuestiones, nos permitirá comprender mejor como esta historia se resignifica bajo una nueva óptica, aunque se nos haya contado tantas veces. Se trata de una propuesta que involucra tintes mitológicos, históricos y culturales para intentar conmover y mostrar los hechos bajo una mirada distinta. No es tanto lo que se nos narra, sino como está contado.

Existen otros elementos y personajes que no se han nombrado aquí, como el de la reina Gudrun, la posible aparición de las Nornas, Olga (el interés amoroso del personaje), Thorir (el hijo de Fjölnir), el ritual de la fertilidad de Freyr; los cuales dejaré por fuera de este recorrido con la intención de no extenderme más y dejar que disfruten por su cuenta de esta aventura que nos propone “The Northman”.