DON'T WORRY DARLING (2022) sólo funciona por que Florence Pugh es la única que sabe lo que hace

Mucho ruido y pocas nueces, así puedo describir mi sensación al ver “NO TE PREOCUPES CARIÑO“. Olivia Wilde se hizo mundialmente conocida gracias a su papel de ‘13‘ en la serie “Dr House” y si bien tiene bastantes películas a su haber (“Tron Legacy“, “Cowboy & Aliens” entre las más conocidas), no fue sino cuando debutó en la silla de dirección frente a la película “Booksmart” que comenzó a dar de qué hablar gracias a esta bonita y graciosa película. Luego su cortometraje “Wake Up” (2020) si bien recibió criticas mixtas, no tuvo un mal recibimiento.

Quiero creer que lo que pasó con “Don’t worry Darling” fue que Olivia se creyó demasiado el cuento para un trabajo de esta envergadura. Pasar de una película independiente a una producción de muy alto presupuesto con actores y actrices de reconocimiento mundial, fue algo que daría de que hablar si todo salía bien. Y todo salió mal.

No voy a hablar de las polémicas en el set, de su drama con el actor original de Jack (Shia Lebouf) o de que en muchas ocasiones fue la misma Florence Pugh quien tuvo que dirigir escenas de la película ya que la directora estaba “en otra” con el co-protagonista Harry Styles. Quiero creer que la idea en general era totalmente distinta y que esto fue un horrible tropiezo, que sin darse cuenta, puede llegar tener un efecto dominó al punto que podría perjudicarle su carrera a largo plazo.

“NO TE PREOCUPES CARIÑO” es una película que tiene ideas muy buenas, paisajes hermosos, una bonita fotografía pero que sus 2 horas son tediosas, un ritmo lento y abrumador, cortes a planos que no aportan en nada pero sólo se muestran para parecer interesantes. Sí, la historia principal tiene varias capas. Sí, Florence Pugh es lo mejor de la película donde logra con su carisma y talento sacar adelante este desastre.
El gran problema de la película es que todas sus ideas quedan ahí, inconexas, sin cerrar.

La película se quiere presentar como un thriller, una película perturbadora, algo que te genere incomodidad, pero llega un punto en que sólo quieres que termine, no te produce las sensaciones que debería producirte. Olivia Wilde quería entregar una historia con fuertes toques de feminismo ¡y eso está super bien! Quería entregarnos algo original, algo que nos dejase con la boca abierta… y si esta película hubiese llegado unos 15-20 años atrás, estoy de lo más seguro que habría tenido un mejor resultado.

Si bien el primer y segundo acto te dan la sensación de “esto ya lo he visto en algún lado“, es cuando las piezas comienzan a encajar en el tercer acto y se devela toda la verdad que puedo llegar a decir “Hey, esto puede funcionar y cerrar bien!“… para finalmente llegar a ningún lado.

El “villano” de la historia es Frank (Pine), el líder de este Victoria, un hombre de secretos, alguien que controla todo y a todos. Kate sabe que algo está mal ahí, pero especialmente con él. Y el lo sabe, y lo disfruta. Chris Pine da una muy buena actuación para lo que es esta película pero la poca imaginación que tiene Olivia para poder cerrar la historia de este personaje da pena ajena, da risa. Por que le crees todo…y su desenlace es fatal.

En cuanto a Harry Styles, está bien, nada del otro mundo. Seguro “NO TE PREOCUPES CARIÑO” será un éxito por que irán sus fans a verla, pero como actor déjenlo ahí, que siga con su música que no suena mal.

Al final, es Florence Pugh quien se lleva los aplausos por lograr sacar a flote una película que terminará siendo recordada por sus desastres previos y no por que la película tenga algo para ofrecer.

NOTA: 3/10 (y ese 3 es sólo por Florence)