UNA SUPERCALIFRAGILISTICA AVENTURA DE ZOMBIS

Querido lector prepárate para descubrir una de mis películas favoritas en este articulo libre de spoilers. Una película que es indudablemente una de las mejores producciones que se han realizado en Inglaterra e incluso en el mundo en los últimos 33 años. Y es que no por nada para Quentin Tarantino está en su TOP 20 de mejores películas.

Recuerdo que cuando la vi por primera vez, fue de esas películas que despertó mi pasión por el cine (carrera que he perseguido desde entonces y me ha llevado a realizar mis propias películas) y es que he sido de los pocos afortunados en tener el DVD original con el detrás de cámaras, que lejos de ser un simple video de cómo se hizo la película, es en realidad un documental… bueno no tanto, tal vez una clase ¡No! Es más que una clase, es un master class de realización cinematográfica.

Pero bueno, no he revelado cuál es la película, por lo general me emociono tanto al mencionarla que comienzo a revivir los mejores momentos en mi cabeza y me pierdo en los recuerdos de tan magnánima obra. En todo caso es una película de zombies, pero no cualquier película de zombies, es una película de zombies tan impresionante que el mismísimo padre del cine de zombies (George A. Romero) quedo impresionado con la película. Además, podríamos hablar de que es una obra que cambio las reglas de juego, pues hasta el momento no se había realizado una película del género zombie mezclada con comedia, un acierto que no ha sido igualado desde que se estrenó esta película.

A esta altura la mayoría de cinéfilos ya deben saber cuál es la película, pero para aquellos que no saben (porque no la han visto) el nombre de la obra es: Shaun of the Dead, dirigida por Edgar Wright (tal vez lo conozcan por dirigir películas como Baby Driver o Last Night in Soho) y protagonizada por Simon Pegg y Nick Frost, quienes están en el top 5 de actores cómicos ingleses.

Pero ¿de qué trata Shaun of the Dead? Pues es la historia de Shaun, un vendedor de electrodomésticos inmaduro, que junto a su mejor amigo Ed, deberá rescatar a sus seres queridos y encontrar un lugar seguro para sobrevivir al apocalipsis zombie que amenaza Londres.

Y es que, si bien Shaun of the Dead es una película de comedia que hace referencia, tributo y sátira a las películas de zombies, está lejos de ser un popurrí de gags descabellados como en la tan conocida saga de Scary Movie; en realidad Shaun of the Dead es una película sería que se centra más en el drama de los conflictos internos y personales de su protagonista Shaun, completando un arco dramático de crecimiento personal decorado por muertos vivientes y un humor británico sutil e inteligente que le da ese toque especial.

Adicionalmente, extendiéndome en el guion de la película, ésta no solo tiene la sólida estructura de una historia clásica, sino que también tiene diálogos naturales, ingeniosos y graciosos. Por otro lado (aún hablando de guion) Simon Pegg y Edgar Wright hacen un juego con los personajes secundarios en donde estos representan diferentes características de las personalidades de los protagonistas; es decir, los amigos de Shaun van a representar dos características opuestas de Shaun (la inmadurez y la responsabilidad) mientras que los amigos de Liz van a representar, uno el corazón (las decisiones emocionales) y el otro el cerebro (la toma de decisiones racionales), solo este detalle pone a la película en otro nivel de interpretación.

Ya he mencionado que el detrás de cámaras es un master class para todo aquel que quiera aprender a hacer cine o que le gusten esas cosas; sin embargo, yo realmente recomiendo esta película a todo estudiante de cine, pues el manejo de cámara y el montaje de la película esta milimétricamente calculado y tiene más trabajo que el de un ingeniero chino para quien un milímetro de diferencia puede representar una condena de muerte por que se la ha caído un puente con recursos del estado dejando en vergüenza al PCC. Para resumir, el montaje es impresionante pues le da una agilidad, ritmo y armonía a la narración como muy pocas veces se ve en las películas; todo esto acompañado de una banda sonora espectacular en la que podemos encontrar canciones de Queen. Y ya que hablamos de música voy a mencionar que en la película hay un cameo de dos músicos MUY famosos, dato que me lleva al último punto.

Y es que, si la historia, los diálogos, las actuaciones, los zombis, el montaje o la música no son suficiente argumento para querer ver esta película; debo hacer una mención especial a los huevos… los huevos de pascua o Easter eggs que abundan en Shaun of the Dead. Y es que la repito muchas veces no solo por qué es muy buena y me entretiene haciéndome reír como un bebé que tira la comida al suelo solo para disfrutar de la vista de su abnegada madre limpiando su desorden, sino también porque en cada repetición se descubren nuevos huevos de pascua y referencias a otras películas… casi como si fuera un juego de ¿Dónde está Waldo?

Así que estas son mis razones para nominarla como película digna de ser repetida y espero que quienes no la han visto, vayan a verla, y quienes ya la hayan visto vayan a verla de nuevo como me dispondré yo a hacerlo en este instante.