RÁPIDOS Y FURIOSOS PRUEBA QUE EL ABSURDO PUEDE CON TODO.

Han pasado más de 20 años, 10 películas, miles de millones de dólares en recaudación, la tragedia de Paul Walker (que en paz descanse), e incluso alguna que otra guerra de egos entre Vin Diesel y la Roca. Aún así, la saga 'Fast & Furious' continúa siendo algo sumamente rentable, más allá del “supuesto” agotamiento de la sociedad frente al producto, que no dejan de ser fieles espectadores.

Cuando Diesel y Walker hicieron aquella película a inicios de los 2000' sobre autos, robos y carreras clandestinas, dudo mucho que se imaginaran que tal proyecto iba a atravesar una metamorfosis al género de la ciencia ficción, rozando el de superhéroes. Al principio se mantuvieron en la línea con su fórmula original semi clásica, aunque alternando personajes hasta que el estudio logró establecerla bien como saga, a partir de la cuarta, en cual ya somos testigos de las primeras locuras que decías “Woa, esto es una cosa loca surrealista" pero después en la quinta, al mejorar increíblemente la fotografía, la adicion de la Roca, una caja fuerte que rompió todo Río de Janeiro, Danza Kuduro, coches excesivamente caros siendo destruidos constantemente, convertir a los personajes de criminales a agentes secretos, meter a un villanazo como Jason Statham que conectó con las pelis anteriores, incluso copiar la moda de Marvel con las post-créditos más un sinfín de cosas más, crearon a un monstruo.

¿Y así podemos seguir no? Saltos en auto de un edificio a otro, amenazas globales cibernéticas, personajes que mueren y reviven constantemente, Toretto invencible a todo, aviones que explotan con gente dentro pero que no les pasa nada, etc. Ahí la gente ya empezó a manifestarse, pero no podían parar de consumir y los que podían abandonar se quedaron por lo que ocurrió después.

El quiebre de no retorno se produjo en 'Furious 7' cuando el fallecimiento de Paul Walker sacudió al mundo y a la producción de este filme. Pero, fue algo que a su vez más morbo generó: ¿Cancelamos la película? No, hacemos las escenas que le quedaron por filmar a Paul con CGI y le dedicamos la cinta con una emotividad tremenda sumada a un cierre que podría haber servido como culminación más una canción que hasta el día de hoy se usa y se asocia al hecho. Desde esa película, la saga se marcó a fuego en todos.

Hizo tanta pero tanta plata, entre fanáticos y gente que solamente quería ver como se manejó el tema de Paul, que claramente había que seguir y a partir de ahí, el señor Vin Diesel, usa la memoria de Paul para justificar todo lo que hace en su vida y continuar con la franquicia. ¿Podemos culparlo? No, porque somos cómplices y aunque nos lo cuestionemos, nos gusta.

Acá comienzan a aparecer la 8, la 9 y el SPIN-OFF al que podemos decirle, la hermosa polémica de egos entre Vin Diesel que dice: "Hey, como es que la Roca va a igualar mi protagonismo? Es como una falta de respeto a Paul" Por lo que el estudio decide hacer "Hobbs & Shaw" aprovechando que el luchador y la estrella de acción antagónica hicieron buen match. Acá hicieron una peli re loca que mezcló componentes hawaianos con superhéroes, expandiendo el Universo Cinematográfico. ¿Lo aprobamos? No, pero lo aceptamos como gusto culposo. Eso es lo que pasa con esto. ¿Vale realmente la pena quejarse o tildarlo de innecesario o seguir apelando con que es surrealista?

Mientras tanto, en la saga principal, reconocidas estrellas comenzaron a caer, Charlize Theron, John Cena y varios más, pero lo que más se destaca es la capacidad de aumentar su propio desafío de volverse más y más surrealista, jugando con lo irreverente, aceptando que la franquicia es un meme multimillonario. Corrieron por la Antártida mientras un submarino salía desde abajo del hielo, drones que aniquilan ciudades, FUERON AL ESPACIO EN UN COCHE, una bomba esférica rebotó por todo Roma, el hijo de Toretto cambió de color y hasta hacen chistes sobre la propia credibilidad de ellos mismos como personajes que desafían todo límite, como de alguna manera rompiendo la cuarta pared.

Se estrenó la "última película" (que nunca es la última) con Jason Momoa haciendo un personaje loquisimo, pero decidieron dividirla en dos partes. En medio de esas dos partes, Momoa tuvo conflictos con Vin Diesel, entonces volvió la Roca y habría otra película más. A su vez, después de hacer la entrega más demencial, ahora quieren volver a las raices para cerrar, pero no descartan más spin-offs.

¿Saben que es lo más gracioso de esto? es que absolutamente TODOS se quejan al respecto, patalean en las redes sociales, los críticos de cine pierden pelo hasta quedarse pelados como Vin y la Roca haciendo reseñas negativas, pero ahí siguen todos: mirando, pagando esa entrada que aporta a la próxima locura de la que vas a volver a quejarte, es un círculo vicioso, y aunque les duela admitirlo: en el fondo les gusta y quieren más. Varios de los que dicen que no, mienten.

Además, ya es demasiado tarde. Se pasó esa barrera donde necesitan la recaudación y la aprobación para seguir adelante. La saga ya es hace rato un coche que se conduce solo y va a seguir pasando por arriba a todos los que continúen perdiendo su tiempo en manifestarse en contra, en vez de aceptar que en este caso, es simplemente un espectáculo masivo y grotesco que no pretende "ser cine", sino hacer que vayas al cine a gastar ese tiempo para que te distiendas disfrutando de lo patéticas pero entretenidas que son estas pelis y como van superandose en sorprenderte con lo absurdo, que en realidad no es mucha sorpresa porque siempre te lo ponen en los trailers.

Toretto y sus amigos no tienen absolutamente nada que envidiarle a Marvel o DC, ni a Transformers. Y el futuro está lleno de posibilidades infinitas, aunque simulen que está por terminar.

Acá ya no importa quejarse o gritar a los cuatro vientos "Rápidos y Furiosos murió en la ...." (añadir el número de película que desees).

Como dice el titulo de esta actividad ¿Otra secuela más? A lo que yo respondo:

“Lo único que importa, es la familia.”