Zendaya será la próxima gran estrella de Hollywood y te contamos por qué

Cher. Madonna. Beyoncé. Como ellas, Zendaya solo necesita un nombre y un enorme talento multifacético para conquistar Hollywood. Hoy, se perfila para ser una de las más grandes estrellas de la meca del cine de su generación y en este artículo te diremos cuál es el secreto de su mega éxito.

Como toda estrella Disney, desde muy joven Zendaya demostró su talento para el canto, el baile y la actuación. Eso ya lo habían hecho otras sensaciones juveniles del mismo canal de televisión como Miley Cyrus, Selena Gomez, Ashley Tisdale o Vanessa Hudgens; pero Zendaya decidida a desmarcarse de la casa del ratón y para ser tomada “en serio” como actriz, tuvo que renunciar al canto. Y también renunció a su apellido (al comienzo de su carrera era conocida como Zendaya Coleman), algo típico entre las estrellas pop. Sin embargo, ambas decisiones le funcionaron. Por eso hoy se perfila como una de las favoritas del público y una de las actrices más solicitadas por los grandes directores. Su próxima película, Challengers dirigida por Luca Guadagnino es un ejemplo de ello. Y es que el éxito de Zendaya es una mezcla de sabías decisiones que vamos a diseccionar ahora mismo.

De niña Disney a actriz de renombre

Sus primeros años en comedias de Disney Channel como Shake It Up y K.C. Undercover la consagraron como una joven estrella carismática. Su estancia de ocho años en Disney Channel (una de las estrellas con la carrera más longeva dentro del canal), le permitió demostrar su don para la comedia y su presencia cautivadora en la pantalla. Pero también demostró sus dotes como bailarina y cantante, lanzando un álbum homónimo en 2013 bajo el sello de Hollywood Records (la casa productora del canal que cobijó a otras estrellas Disney como Miley Cyrus, Demi Lovato y Jonas Brothers). Esto le permitió perfeccionar su arte en un entorno seguro, creando una base de fans entregados (que empezaron como niños y fueron creciendo junto a ella), mientras mostraba su talento natural.

Sin embargo, aunque el álbum funcionó bien dentro de la crítica, no tuvo el impacto que se esperaba entre el público, debutando en el puesto 51 del ranking Billboard. Tal vez eso influyó a que Zendaya replanteara mejor el rumbo de su carrera y decidiera inclinarse de lleno a la actuación, ya que después del lanzamiento de este hubo un punto de inflexión en su carrera.

En 2017 llega su primer gran rol en la pantalla grande y lo hace de la mano de Marvel, probablemente la franquicia más popular en ese momento. Zendaya dio vida a M.J. en la tan esperada Spider-Man: Homecoming, rol que repitió en sus secuelas Spider-Man: Far from Home (2019) y Spider-Man: No Way Home (2021). Su participación en una de las trilogías más famosas dentro del Universo Cinematográfico de Marvel (que acumuló casi cuatro mil millones de dólares en taquilla), la catapultó como uno de los rostros más famosos entre el público adolescente y adulto joven. Ahora era el momento de consolidar su estatus de actriz.

Su talento multifacético la llevó a protagonizar The Greatest Showman junto a Hugh Jackman y Zac Efron. Aunque la película no conquistó a la crítica, se convirtió en el musical original más taquillero de todos los tiempos (recaudando casi 500 millones de dólares) y la actuación de Zendaya fue una de las más aplaudidas dentro del filme. Para entonces no era secreto que podía cantar y bailar muy bien, pero era momento de demostrar su valía como actriz dramática. Su interpretación de Rue Bennett en el drama de HBO, Euphoria, supuso otro punto de inflexión. El papel, emocionalmente complejo, exigía una vulnerabilidad y una profundidad que Zendaya supo plasmar con asombrosa madurez. Su interpretación de una adolescente drogadicta que lucha contra la adicción, el trauma y la identidad le valió el aplauso de la crítica, un premio Emmy a la mejor actriz protagonista de una serie dramática, y consolidó su estatus como una fuerza a tener en cuenta.

Dune, su segundo punto de quiebre

Con Disney, Zendaya había conseguido fama; y con HBO el respaldo de la crítica que tanto se le había resistido. Necesitaba un proyecto que le permitiera conjugar ambos factores para consolidarse como la estrella que estaba destinada a ser. Y esa oportunidad llegó con Dune, la adaptación del libro homónimo de Frank Herbert. Se trata de una de las películas más esperadas por los fanáticos de la ciencia ficción que durante años se dijo que “era imposible de hacer”. Pero Denis Villeneuve, quien venía de acumular una lista de éxitos entre la crítica (tales como Arrival, Sicario y Blade Runner 2049), tomó el reto y sacó adelante el proyecto, contando con un elenco de estrellas (como Oscar Isaac, Josh Brolin y Javier Bardem) y algunas promesas de la actuación como Timothée Chalamet y, por supuesto, Zendaya.

En esta epopeya de ciencia ficción Zendaya interpreta a Chani, una feroz guerrera Fremen con una fuerza y una determinación silenciosas. Este papel dejó entrever su capacidad para manejar personajes complejos en películas visualmente impresionantes. La cinta recaudó más de cuatrocientos millones de dólares y condujo a Zendaya al centro de atención del gran público.

Una estrella del siglo XXI

Zendaya es una de las pocas actrices de su generación que ha sabido utilizar su fama sabiamente, y eso también ha influido en su estatus de estrella. Además de su talento y su notoria influencia en las redes sociales, Zendaya es también un icono de la moda que adorna las alfombras rojas con un intrépido sentido del estilo que supera los límites y redefine las expectativas de la moda.

A diferencia de las estrellas de la generación pasada, Zendaya se ha perfilado como una firme defensora de la justicia social; ha utilizado su plataforma para denunciar la injusticia racial, la desigualdad de género y la discriminación de la comunidad LGBTQ+.

Challengers, su verdadero desafío

Hasta la fecha, sus principales trabajos en el cine han tenido un factor extra al cual acuñarle el éxito en taquilla: Spider-Man es una producción de Marvel, el verdadero protagonista de The Greatest Showman era Hugh Jackman, Dune era una de las películas de ciencia ficción más esperadas, adaptación de uno de los libros de dicho género más famoso de todos los tiempos.

Es por eso que Challengers es su primer gran reto, con el que deberá demostrar su verdadero arrastre en taquilla. Se trata de su primer protagónico absoluto en la pantalla grande, de manos de Luca Guadagnino, un director que si bien tiene fascinada a la crítica, aún no ha logrado cautivar al gran público. Se dice que Challengers o Desafiantes, como se le conoce en Hispanoamérica, es la película más accesible del director italiano y con Zendaya al frente, se supone que será también su primer éxito entre el público medio.

Tal vez haya actrices más talentosas que ella, y otras más famosas. Pero Zendaya es la máxima estrella de su generación porque ha cautivado al público y a la crítica. Aunque su nombre evoque el aura de una estrella pop, estamos ante una actriz que ha encontrado el equilibrio perfecto entre fama y respeto, asemejándose más a lo que Natalie Portman, Jennifer Lawrence o Emma Stone hicieron antes que ella. Esta combinación de destreza interpretativa, influencia en el mundo de la moda y activismo social crea un conjunto poderoso y cautivador. Zendaya no es sólo una actriz; es una fuerza cultural, un modelo a seguir y una voz para su generación.