Mi amigo Robot: directa al corazón.

La película española dirigida por Pablo Berger adapta una novela gráfica del 2007 creada por Sara Varon. Debutó en el festival de Cannes 2023 como proyección especial y desde entonces ha desfilado por muchos grandes festivales llevandose a casa el premio en mejor película en los Goya, los Annie entre otros, el premio del público en Sitges y una nominación a los Oscars en la categoría de película animada. Es evidente que el prejuicio hacia la animación no se va a ir de un día para otro ya sea en Festivales o premiaciones. Lo que es mas que evidente con esta película es la profundidad que pueden alcanzar porque como bien dijo e insiste en decir Guillermo del Toro, la animación es un formato no un género y no tiene como público objetivo necesariamente a niños y niñas. Una vez dicho esto, pasemos a la peli.

En un New York alternativo donde los animales antromorfizados pueblan la tierra, hay un personaje al que conocemos simplemente como Perro (todos los personajes carecen de nombres mas que su denominación como especie) que desde sus primeras escenas nos lo presentan como una persona solitaria que pasa sus noches comiendo cenas congeladas de supermercado y haciendo zapping en la televisión. Rápidamente llega a la conclusión de que lo que necesita en su vida es compañía por lo que a partir de un infomercial decide comprarse un Robot amigo. Este llega por correo desarmado por lo que después de un día de arduo trabajo, Perro conoce a su nuevo mejor amigo. Robot es un recién nacido que empieza a descubrir los milagros de la vida y del mundo, ademas de aprender a ser un amigo/compañero para Perro.

Después de una serie de hermosas escenas de asombro y diversión (incluyendo a la escena de baile callejero al son de Earth, Wind & Fire que va a pasar a la historia), Perro y Robot viajan a la playa y he aquí el punto nodal de la historia, por razones que no voy a spoiler nuestros protagonistas deben separarse. De aquí en mas vemos una serie de desgarradoras escenas cuando vemos por un lado a Perro intentar por todos los medios regresar con su amigo mientras que éste contempla pasivamente el paso de las estaciones.

Durante el tiempo que están separados, Perro se enamora brevemente, conoce el desamor, intenta cosas nuevas y sale un poco mas de su burbuja de aislamiento, pero nunca deja de pensar en su amigo. Para ser una película prácticamente muda es extremadamente demostrativa, porque es claro que a veces las palabras están de mas.

Hasta acá lo que respecta a la trama. En lo personal creo que la película hace una gran reflexión sobre el amor y la amistad, el paso del tiempo, los recuerdos creados y el porque es tan necesario para el ser humano como ser social no vivir en el pasado sino siempre mirar hacia adelante. Soltar le dicen algunos, yo prefiero la palabra Crecer. El final de la historia podrá no ser el que el público quiere pero es el indicado.